El consejero delegado de Barcelona Tech City, Miquel Martí, ha advertido en pleno conflicto del taxi y las VTC que “el modelo tradicional y el nuevo deben convivir”. El centro de innovación de la ciudad se posiciona de esta forma en el debate público que se ha abierto sobre el futuro de empresas como Uber o Cabify en el territorio.
Cabe tener en cuenta que la primera de ellas es uno de los 700 asociados que tiene la organización dedicada a la promoción de la emprendeduría. “Nosotros estamos absolutamente en contra de la violencia y el chantaje”, ha asegurado Martí.
Regulación “adecuada”
Para los responsables del Tech City, el Gobierno debería promover la “regulación adecuada para que este encaje exista” y no acabe con ningún operador expulsado. ¿Ha hecho esto la Generalitat? El responsable de la organización ha sido muy cuidadosa de que su declaración no se pueda interpretar en clave partidista. Esto ha sido una de las máximas fundacionales de la entidad y ha conseguido mantenerlo en momentos tan sensibles como la declaración simbólica de independencia en el Parlament. El punto álgido del procés.
Martí se ha limitado a reclamar una normativa equilibrada, el gran reto para todas las administraciones inmersas en la regulación del mercado de la movilidad. Ha abierto la puerta a que expertos del Barcelona Tech City participen en el debate.
Participación en el debate
“Estaremos encantados de colaborar para que, como mínimo, haya cierto diálogo”, señala el consejero delegado. Hasta el momento, las agrupaciones de tecnológicas no han participado en la discusión que se ha abierto para marcar el camino a firmas como Uber y Cabify convivan con un sector regulado como el del taxi.
La consejería de Territorio apuesta por ahora por un reglamento catalán que obligue a una precontratación de 15 minutos. Este plazo se podrá ampliar hasta los 60 minutos que reclama la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, si así lo indica la normativa del Área Metropolitana, una institución que también preside la líder de BComú. La Generalitat habilitará a los municipios y otras organizaciones supramunicipales para modificar esta parte de la norma, la más sensible. Ha generado las protestas tanto de los taxistas como de conductores de VTC.