Los Mossos d'Esquadra han iniciado una investigación para determinar cómo se quedaron encerrados tres menores tras una puerta de seguridad antiocupación en un piso previamente ocupado de Ciutat Meridiana de Barcelona.
Los hechos ocurrieron sobre las 19 horas del 4 de enero, cuando la madre --que había salido a trabajar-- avisó a la policía catalana de que sus tres hijos menores estaban encerrados en su vivienda y no podían salir porque había sido cerrada con llave una puerta antiocupación --un segundo puertón metálico que se coloca por encima de la puerta habitual--. Finalmente, los Bomberos de Barcelona tuvieron que actuar para liberar a los menores.
Sin denuncia
Hasta el momento, los Mossos no han recibido ninguna denuncia por parte de la propiedad ni de la mujer. Aunque los agentes siguen con la investigación sobre las circunstancias de lo ocurrido.
La familia ha podido volver a la vivienda tras la actuación de los servicios de emergencia, ya que no existe ninguna orden judicial de desahucio.
Casa ocupada
Según el banco gestor, la vivienda fue vendida este verano a un fondo de inversión, aunque la entidad financiera continúa con la gestión del inmueble.
También han apuntado que esta casa había sido ocupada hace unos meses por una familia, y que el banco intervino a través de su empresa encargada de gestionar los problemas de acceso a la vivienda y se acabó desocupando.
Acción de un operario
El pasado viernes los vecinos avisaron a la entidad financiera de que había movimientos en la vivienda, por lo que envió a un operario para comprobar el estado de la casa. El asalariado se encontró con la puerta que se utiliza para evitar nuevas ocupaciones abierta y decidió cerrarla. El trabajador ha afirmado que primero llamó para comprobar si había alguien y no obtuvo respuesta.
La entidad ha remarcado que se ha puesto a disposición del Ayuntamiento para tratar este tema con los nuevos ocupantes, tal y como ha subrayado que hizo con la anterior familia que ocupó la vivienda.