Una mujer de 90 años se ha convertido en la primera víctima mortal tras ser arrollada por un patinete eléctrico que iba a 30 kilómetros por hora. En el vehículo viajaban de manera irregular dos jóvenes. Los hechos se produjeron en Esplugues de llobregat, una localidad cerca de Barcelona.
El suceso tuvo lugar el pasado agosto y no se ha dado a conocer hasta que no se ha iniciado el proceso judicial contra los dos ocupantes del patinete eléctrico.
Excesiva velocidad
Según pública El País, el patinete eléctrico iba a una velocidad de 30 kilómetros por hora, una velocidad excesiva e ilegal para este tipo de vehículos. En el accidente, los dos jóvenes impactaron con la anciana que cayó de inmediato contra el suelo y se golpeó la cabeza.
El choque ocurrió en una avenida muy concurrida de la localidad del Baix llobregat, la rambla del Carme. La mujer que fue rápidamente ingresada en el Hospital, ya muy grave, murió pocos días después como consecuencia del atropello.
Proceso penal
No ha sido hasta el inicio del proceso judicial contra los dos jóvenes que no ha transcendido la noticia del fatal accidente, aunque desde el ayuntamiento ya se abordó en la junta local de seguridad. Ahora, los dos ocupantes del patinete eléctrico se enfrentan a un juicio.
Desde la Fiscalía se decanta por imputar por una imprudencia grave con el agravante de una muerte. Como se trata de un vehículo de movilidad personal (VMP) no puede tratarse con el tipo penal de delito contra la seguridad vial, que solo es aplicable en caso de vehículos a motor.
Patinete manipulado
El patinete en el que los dos jóvenes arrollaron a la anciana, iba a 30 Km/h, una velocidad excesiva para este tipo de vehículo, por lo tanto el artefacto podría estar manipulado. Este hecho preocupa a la Fiscalía ya que no es el primer caso de una mala praxis con esto artilugios --un taxista cazó a un imprudente por la diagonal a 80km/h--.
El Ayuntamiento de Barcelona introdujo una nueva normativa de circulación adaptada a los patinetes el pasado septiembre con el objetivo de rebajar la tensión con los peatones y conductores. Por su parte, la Dirección General de Tráfico (DGT) se ha mostrado también dispuesta a regular el uso de estos vehículos eléctricos.