Las últimas medidas sobre movilidad y contaminación del ayuntamiento de Barcelona han generado una fuerte controversia entre los motociclistas. El descontento ha propiciado la convocatoria de una manifestación que recorrerá las calles de la capital catalana en señal de protesta. La cita, organizada por dos asociaciones de moteros, será el próximo 2 de diciembre, a las 11:30 h de la mañana, en el estacionamiento de la playa de La Marbella.
Los convocantes, la Unión Internacional para la Defensa de Motociclistas (UMI) y la Agrupación Motera Catalana (AMC), se quejan de que la nueva normativa ambiental restringirá el uso de estos vehículos cuando se produzcan determinadas circunstancias, según adelantó Metrópoli Abierta.
Restricciones por contaminación
La normativa municipal impedirá circular en las zonas de bajas emisiones (ZBE) de la ciudad a aquellas motos que no tengan el certificado medioambiental de la DGT cuando la Generalitat declare episodios de alta contaminación atmosférica. Un fenómeno que suele producirse dos o tres veces al año.
La restricción, según cálculos del consistorio, afectaría a unos 60.000 motoristas --un 12% de las motos que actualmente hay en la zona metropolitana--, que hasta ahora estaban exentos de estas limitaciones al no disponer aún de las etiquetas de la DGT.
La propuesta
Las dos organizaciones de moteros interpretan que las medidas del ayuntamiento no abordan "una visión amplia de las capacidades" que la motocicleta tiene para la movilidad de una gran ciudad como Barcelona. Y que "los problemas de siniestralidad vial en motocicletas no se solucionan moralmente reduciendo el uso de motocicletas".
A juicio de la UMI, "la motocicleta es un recurso para la movilidad inteligente capaz de ofrecer a las grandes ciudades un modelo de dinamismo económico y social basado en el uso de menor tiempo durante la movilidad, ahorro energético, descongestión estática y dinámica, menos emisión y menos tiempo de emisiones".
Por todo ello, los convocantes de la manifestación proponen al consistorio encabezado por Ada Colau diez medidas "para promocionar la motocicleta con seguridad". Sus ocho puntos piden lo siguiente:
- Que se entienda la motocicleta como una solución a la movilidad en Barcelona, sin sufrir restricciones circulatorias contrarias a la necesidad de los ciudadanos.
- Que se activen y ejecuten planes de seguridad vial eficaces, basados en el conocimiento del riesgo.
- Que se respete el marco legal en materia de seguridad vial en general y de señalización e infraestructuras en particular, prestando especial atención a coeficientes de rozamiento, obstáculos y modos de segregación del carril bici, ciclos semafóricos, obras, etc.
- Que se habiliten “carriles moto” especiales de entrada a la ciudad de Barcelona, en determinadas vías.
- Que se amplíen los estacionamientos de motocicletas en superficie.
- Que permita el uso del carril bus en determinadas vías.
- Que se activen campañas sobre visión periférica y filtrado de riesgo durante la conducción para todo tipo de conductores, incluidos los de motocicletas.
- Que se abra una mesa de trabajo especial de seguridad de motociclistas con el tejido asociativo organizado, para su debate técnico y consenso.