El cambio de hora se hizo efectivo durante la madrugada del sábado al domingo, cuando a las tres los relojes se retrasaron una hora para volver a indicar las dos de la mañana. Hay posibilidades de que sea una de las últimas veces que tengamos que hacer este cambio de hora, ya que la Unión Europea está estudiando eliminarlo. Y parece que, de concretarse, será una decisión muy celebrada en España, ya que cuatro de cada cinco españoles se muestran de acuerdo con ella.
Son datos recogidos en un estudio elaborado por Conforama en el que se revela cómo cambian los hábitos de los españoles con la llegada del frío y del cambio de hora. Los resultados coinciden con los de la consulta pública realizada por la Unión Europea el pasado mes de agosto. En ella más del 80 % de los 4’6 millones de ciudadanos que participaron abogó también por la eliminación del cambio de hora.
Preferencia por el horario de verano
El estudio, titulado Modo Casa ON, muestra la preferencia de los españoles: un 70% se decanta por el horario de verano “para así disfrutar de más horas de luz por la tarde”. De esta forma se podría aprovechar más la tarde y llegar a casa antes para estar con la familia o la pareja, tener tiempo para las aficiones y para desconectar, hábitos que en otoño se postulan como los momentos de ocio favorito de los españoles.
También se pone de manifiesto que cerca del 90 % de los españoles cambia sus costumbres con la llegada de los meses de frío y de menos luz, y prefiere pasar más tiempo en casa para dedicarlo a actividades como ver la televisión, leer o cocinar. En el sondeo se confirma, además, que los españoles tienen rutinas hogareñas muy pronunciadas, ya que el 80% de la población afirma seguir unas pautas al cruzar la puerta de casa. Ponerse ropa cómoda y calzarse las zapatillas de estar por casa es el ritual que cuenta con más adeptos.