El hombre acusado de grabar a mujeres en las calles de Santiago de Compostela para subirlas a páginas de contenido pornográfico ha quedado en libertad tras declarar en el Juzgado de Instrucción número 2 de A Coruña.
El vecino de la capital gallega fue detenido el pasado miércoles. Tiene 34 años. La Policía Nacional recoge que son, hasta ahora, 17 las víctimas conocidas. Los juzgados de Santiago, según fuentes judiciales, determinarán si los hechos producidos por el arrestado constituyen delito además de determinar su tipología.
Grababa el "trasero" de las chicas
Los agentes procedieron a su detención tras recibir numerosas denuncias por parte de mujeres jóvenes. Las víctimas aseguraban que habían sido grabadas sin su consentimiento cuando recorrían las calles de Santiago. Entre las afectadas hay una menor de edad.
Las mujeres acudieron el pasado martes a la comisaría de Santiago para denunciar que un hombre se dedicaba a grabar vídeos en los que "enfocaba al trasero" de chicas jóvenes subiendo posteriormente el material a páginas de consumo pornográfico.
Identificado por la "huella" digital
Los agentes lograron identificar a este individuo gracias al rastro de su "huella" digital en Internet. La Policía inició una investigación para dar con el autor de los hechos hallando en su rastro web la respuesta. Las fuerzas del orden registraron los domicilios relacionados con el detenido y encontraron numeroso material informático, discos duros, tarjetas de memoria, un portátil y el teléfono móvil con el que supuestamente grababa los vídeos.
A través de las redes sociales la noche del pasado miércoles se hizo viral un cartel en el que se detallaba la supuesta identidad del autor de los hechos. El cartel de tipología Se busca detallaba que el "individuo se dedicaba a filmar a mujeres y niñas por la Zona Nueva de Santiago". Bajo un pseudónimo, el detenido subía los vídeos a una página web para adultos, Xvideos.com.
Vídeos objetos de investigación policial
El uso de dispositivos móviles para captar imágenes con contenido sexual o pornográfico se ha convertido en uno de los objetos de investigación policial. El pasado julio, agentes de la Policía Nacional detenían en Valencia a un joven de 29 años por un presunto delito contra la intimidad y pornografía infantil.
La investigación se iniciaba tras la denuncia de una mujer que, al parecer, había descubierto que el propietario de un centro deportivo habría grabado con su teléfono móvil a unas chicas menores de edad mientras se duchaban.