Los 10 paisajes más bonitos de España en imágenes

Playas, montañas, bosques… lugares con encanto y llenos de naturaleza que los convierten en las mejores postales del territorio

4 octubre, 2018 18:08

Redacción @cronicaglobal

Con el auge de Instagram y la importancia cada vez más creciente que se le da a la comunicación visual, no es de extrañar que las imágenes cuidadas sean un factor a tener en cuenta a la hora de escoger el destino de nuestras escapadas. Un reto con muy fácil solución, ya que España está repleta de paisajes bonitos con los que recrearse, experimentar a golpe de luces, inspirarse, triunfar en nuestro muro de redes sociales o, simplemente, desconectar.

Los seres humanos tenemos muchas virtudes. Pero a menudo nos cuesta reconocer la belleza en lo que tenemos y siempre andamos con las miras puestas más allá. Si tenemos el pelo liso lo queremos rizado. Si tenemos la Sagrada Familia envidiamos Notre Dame. Y si viajamos, queremos irnos lejos. Porque extranjero es sinónimo de espectacular, de desconocido y de aventura. Pero también de fotos de paisajes bonitos. Sin embargo, no hace falta coger un avión para descubrir lugares de ensueño, ya sea a simple vista o a través del visor de nuestra cámara o smartphone.

¿Dónde están los paisajes más bonitos de España?

Esta es la ruta por España, de norte a sur, que promete las mejores imágenes de paisajes bonitos para los aficionados a la fotografía. Se puede realizar en coche, lo que permite mucha más autonomía al viajero, poder hacer tantas paradas como se desee y descubrir rincones escondidos que no aparecen en las guías de viaje, ¡y esos son los paisajes bonitos más reales!

Playa de las Catedrales (Lugo)

Esta costa gallega está considerada como una de las playas más impresionantes de Europa. Este lugar recibe su apodo por la cantidad de arcos de piedra de más de 30 metros de altura que lo recorren, asemejándose a una oscura iglesia gótica repleta tallada en la roca. Para preservarla, el ayuntamiento ha establecido un límite de visitantes al día, así que es importante evitar la escapada en temporada alta.

Selva de Irati (Navarra)

Este bosque repleto de hayas y abetos ofrece una visión espectacular a cualquiera que quiera visitarlo. Especialmente en los meses de otoño, cuando las hojas toman todos los colores anaranjados propios de la estación, convirtiéndose en un paisaje bonito inolvidable. Toda la arboleda está bañada por lagunas y riachuelos, siendo el hayedo-abetal más grande y mejor cuidado de Europa después de la Selva Negra.

Jardines Mossèn Costa i Llobera (Barcelona)

Es una de las mayores rarezas que podemos encontrar en Barcelona, aunque cuando se ve en persona parece mentira que estemos en la ciudad y no en un desierto. Este parque repleto de cactus de todas las especies está situado sobre la falda de Montjuïc, ofreciendo una vista panorámica espectacular del mar Mediterráneo. Además, por su situación privilegiada en la franja litoral, el parque cuenta con un microclima más caluroso que el resto de Barcelona.

Valle del Silencio (León)

Si lo que buscas es conseguir fotos de paisajes bonitos de día o de noche, este es el lugar. Perfecto para los que buscan alejarse del mundanal ruido, pues este enclave natural virgen parece detener el tiempo. Bosques, ríos y montañas se convierten en el escenario perfecto para senderistas, únicamente interrumpidos por alojamientos rurales aquí y allá.

Palacio de Cristal (Madrid)

Detrás de una zona arbolada en pleno parque del Retiro encontramos esta maravilla arquitectónica, una de las más instagrameadas de la capital. Este palacio, construido a finales del siglo XIX, está enteramente realizado en cristal y estructura metálica, pareciendo un invernadero. Y eso fue al principio, con una exposición floral de las Islas Filipinas. Con el tiempo se ha convertido en uno de los edificios más icónicos de Madrid, siendo en la actualidad un espacio de arte del Museo Reina Sofía.

Lagunas de Ruidera (Albacete)

En España tenemos uno de los mejores paisajes bonitos compuesto por lagos de toba. Esto ocurre porque la lluvia que cae sobre el campo de Montiel se filtra en el acuífero, creando barreras de agua que unen lagunas mediante cascadas. Todo ello rodeado de bosques y árboles, conformando uno de los saltos de agua más impresionantes de nuestro territorio. Es recomendable pasar allí una noche, la visión del cielo estrellado reflejado en los lagos no tiene precio.

Binibeca (Menorca)

Este pueblo isleño tiene siglos de historia, pero al ser una fuente inagotable de turismo está perfectamente restaurado. Sus casitas bajas y encaladas, sus escaleras y sus estrechas calles forman un laberinto en blanco nuclear en el que el cuerpo pide perderse. El conjunto del pueblo, que parece sacado de un cuento, conforma una foto de paisaje bonito que parece sacado de una postal.

Mirador de San Nicolás (Granada)

Es poco probable que descubramos nada nuevo, porque el Mirador de San Nicolás es el más famoso de Granada. Su belleza es como de otro planeta. Con la Alhambra y el Generalife de frente, la ciudad completa a los pies y los picos de Sierra Nevada enmarcándolo todo. No en vano, el expresidente estadounidense Bill Clinton afirmó en una visita que hizo hace 10 años que era “la puesta de sol más bonita del mundo.”

Playa de Cofete (Fuerteventura)

Es uno de los rincones más aislados de Fuerteventura, ofreciéndonos una playa impresionantemente virgen de más de 10 kilómetros de longitud y 50 metros de anchura. La soledad, el vacío y el silencio provocan una profunda sensación de paz, lo cual viene acompañado de algunas de las fotos de países más oníricas posibles. Además, su carácter isleño y el particular tiempo de la zona hace que las nubes vuelen muy bajas, cayendo sobre las montañas de alrededor y creando un escenario mágico.

Roque Nublo (Gran Canaria)

Esta formación volcánica es una de las peñas más grandes del mundo. Se trata de un monolito de unos 90 metros de altura con un profundo significado y culto desde la era de los aborígenes. Está rodeado por el Parque Rural del Nublo, todo él declarado Monumento Natural. Es de visita obligada en las horas del atardecer, cuando el cielo se tiñe de azul oscuro y podemos ver todas las estrellas y constelaciones, incluyendo la vía Láctea. Por las fotos parecerá que hemos viajado a Marte.

No cabe duda, no es necesario salir de la frontera española para encontrar las mejores postales de paisajes y lugares bonitos. Solo hace falta buscarlos, coger el coche y dedicarles a cada uno de ellos el tiempo necesario para que nos sorprendan.