Los Mossos d’Esquadra han anunciado este martes que buscan a una vecina del municipio de Blanes (Girona) a la que acusan de abandonar a su perra. El animal fue localizado vagando solo por las calles de la pequeña localidad vecina de Riells i Viabrea, donde corría el peligro de acabar en la carretera y ser atropellada.
Fue el anterior propietario del perro el que advirtió a los agentes de la situación. Vecino de Canet de Mar, cedió la perra a la denunciada durante la segunda quincena de julio. A finales de ese mes intentó hablar con ella para acordar los términos del cambio de titularidad del animal en el censo municipal. Pero lo que debía ser un trámite sencillo acabó con una discusión.
Discusión con la propietaria
De entrada, la mujer no respondió a los requerimientos del dueño legal del animal, según el relato del cuerpo de seguridad catalán. El pasado 30 de julio le comunicó que quería devolverle la perra y le amenazó con denunciarlo por abandono de animales si se negaba a aceptar el retorno.
Días después de esta discusión, el hombre fue requerido desde un centro de acogida de animales de Tossa de Mar (Girona). La perra había sido abandonada en las calles de Riells hasta que fue recogida por los responsables de la perrera.
Multa de hasta 20.000 euros
La fue a recoger y puso en conocimiento de los Mossos d’Esquadra el caso. Tras comprobar su versión, los agentes han procedido a denunciar a la vecina de Blanes. El cuerpo advierte de que se enfrenta a una sanción de entre 2.001 y 20.000 euros por una infracción muy grave de la Ley 2/2008 de Protección de los Animales o a responsabilidades penales.
Explican el caso como modo de advertencia ante una triste realidad de los meses estivales. La proliferación de animales abandonados en las vacaciones de verano.