Hoy en día, mantener una disputa con la Administración o ante los tribunales puede ser mucho más que una cuestión de defensa. En algunos casos vemos vulnerados nuestros derechos tanto en el ámbito laboral como en nuestras relaciones con la Administración y para tratar estos asuntos con éxito es necesario recurrir a un profesional.

No hay duda que este tipo de problemas pueden presentarse en la vida de cualquiera y no son nada agradables, sobre todo cuando no se tiene un conocimiento sobre la disputa. Por ello, tanto para reclamaciones de impuestos como la plusvalía municipal, o para la defensa de un despido improcedente, lo mejor es contar con un equipo profesional y especializado.

Problemas en el ámbito laboral, existen especialistas

Enfrentarse a un despido es una situación que puede llegar a ser traumática para algunas personas. La inestabilidad económica que esto genera y la necesidad de seguir trabajando son sin duda motivo de preocupación y malestar.

Sin embargo, es recomendable mantener la calma y analizar si se han vulnerado nuestros derechos como trabajador, o sencillamente no pueden despedirnos de forma improcedente. Ante estos acontecimientos tan relevantes lo mejor es acudir directamente a abogados laboralistas para buscar información, consejo y solución a un problema concreto.

Una vez contemos con ayuda profesional las opciones son mucho más amplias. Además de la tranquilidad de sentirnos acompañados, será posible realizar alguna acción con mayor garantía de éxito.

El empresario debe demostrarlo

Para que un despido sea considerado improcedente debe autorizarlo un juez, por lo que de principio no todo está de parte del empresario. Será éste el que tenga que demostrar los motivos en los que se basa para categorizar así dicho despido y evitar así una mayor indemnización.

Por regla general los despidos improcedentes se declaras así por dos causas:

  • Errores del trabajador que no se corresponden a la realidad.
  • No se ha comunicado correctamente su cese en el puesto de trabajo, pasando este a ser declarado improcedente.

Notificación clara y entendible por cualquiera

Una de las obligaciones de la empresa o empresario antes de realizar el despido de un trabajador por causas objetivas, es comunicar por escrito y con cierta antelación el cese.

En el mismo escrito, tienen que venir expuestas las causas o motivos que lo originan. Además es de obligado legal que la carta mantenga un lenguaje claro y pueda ser entendido sin dificultad alguna.

Una vez recibida la carta o notificación, se disponen de 20 días hábiles para reclamar, así que no hay mucho tiempo que perder. Con ayuda de un despacho profesional y especializado, es posible demostrar la vulneración de los derechos del trabajador y recuperar el puesto de trabajo con los salarios atrasados en el proceso (algo que puede durar meses), o recibir una indemnización acorde a las características del trabajador y su contrato.

Enfrentarse a la temida Administración

Como mencionamos antes, otro de los servicios más demandados para los abogados, son los referidos a la reclamación de tasas e impuestos. Sin duda uno de los que más controversia ha desatado en los propietarios de bienes inmuebles es la plusvalía municipal. En algunos casos por que no tenían que pagarla y en otros por que han pagado de más.

La plusvalía municipal grava los incrementos de valor que se dan en propiedades inmobiliarias situadas dentro de zonas urbanas. Con el tiempo, las propiedades van aumentando su valor, y ante la posible venta, herencia o donación se estimará cuánto aumentó su valor durante los años de posesión. Este impuesto es recaudado por los ayuntamientos y es completamente legal.

¿Estás obligado a pagarlo?

Dependiendo del rol que tengas en la operación de compra venta, cesión o herencia, tendrás unas obligaciones u otras. Por regla general en el caso de una venta inmobiliaria, será el vendedor quien deba soportar este gravamen.

En ocasiones se realizan ventas por precios inferiores al de la compra por parte del primer propietario. En esos casos, los ayuntamientos también exigen una plusvalía, aunque parezca paradójico. Realmente se trata de una operación que está generando pérdidas, no ganancias.

Así, el Tribunal Constitucional sentenció que cuando la plusvalía era sobre una operación con pérdidas, no había que pagarla. Por ello, si crees que has pagado de más, o que estas exento de haber realizado el pago, quizás estés a tiempo de conseguir recuperar tu dinero con la ayuda de un buen abogado.

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