Los productos ecológicos están cada vez más presentes en nuestra sociedad debido a la gran cantidad de adeptos que se han ido sumando a esta forma de alimentación, principalmente en los últimos años. Por este motivo, cada vez existen más supermercados y establecimientos especializados en ofrecer este tipo de alimentos que buscan el cuidado y la protección del medio ambiente.
En concreto, Barcelona es una ciudad muy comprometida en el avance de la alimentación ecológica y en el desarrollo de una vida sostenible. Tanto es así que esto puede comprobarse gracias a la enorme variedad de establecimientos que se reparten a lo largo de la Ciudad Condal; especialmente todos aquellos dedicados a la alimentación ecológica. Aunque, eso sí, cabe destacar que en los últimos años también han proliferado todo tipo de establecimientos de moda, textiles y complementos orgánicos. En relación a los alimentos ecológicos, estos son algunos de los mejores mercados para adquirir todo este tipo de productos sostenibles en Barcelona:
I Love Food
El local I Love Food, situado en la Calle de Muntaner, es una tienda ecológica que busca acercar la cultura de la dieta orgánica al mayor número de personas posible. Con más de 1.000 productos ecológicos en sus despensas, esta tienda es considerada una de las máximas referentes del consumo responsable en la ciudad.
Entre sus principales elementos diferenciadores, I Love Food destaca por ofrecer un servicio a domicilio de cajas de frutas y verduras, tanto para particulares como para todo tipo de empresas, hoteles u oficinas.
Obbio
El supermercado Obbio es a día de hoy el mercado ecológico más grande de Barcelona. Este complejo alberga todo tipo de tiendas y establecimientos dedicados a la cultura orgánica, desde una frutería, una panadería, una cafetería, el propio supermercado, una vinoteca, etc. Es más cuenta incluso con una pequeña biblioteca con todo tipo de libros especializados en este tipo de alimentación.
Veritas
Veritas es una cadena de supermercados ecológicos repartidos por toda Barcelona y Cataluña. Entre sus innovaciones, además de la venta de productos ecológicos en sus mercados, destacan sus panaderías, en las que se pueden encontrar todo tipo de panes, bollería y tartas hechas con ingredientes 100% orgánicos. Actualmente la cadena es una de las más exitosas en la alimentación sostenible y cuenta con más de 25 locales por toda Cataluña.
Bio Space
Bio Space es un supermercado de productos ecológicos que dispone de una variedad de más de 900 referencias en productos procedentes de la agricultura y la ganadería ecológica. Los comienzos de esta andadura se remontan 30 años atrás por lo que la experiencia de Bio Space en el sector es incluso anterior a las nuevas tendencias de productos orgánicos que tenemos en la actualidad.
Sin embargo, en el año 2000 esta pequeña empresa sufre una transformación y comienza a ampliar su oferta de productos y su impacto en la comunidad catalana. A día de hoy cuenta con todo tipo de productos de dietética, estética e higiene, cosmética biológica, calzado ecológico, libros sobre el sector, y un largo etcétera.
Mon Viu
Mon Viu se define como una cooperativa de agricultores que se reunió hace más de 20 años para llevar a cabo un proyecto ecológico muy potente: el de crear una cadena de supermercados destinados al consumo ecológico tanto en productos de alimentación, como en cosmética, o productos de limpieza, entre otros.
Para ello los productos que se comercializan proceden exclusivamente de los huertos y las granjas de los agricultores miembro de la cooperativa garantizando un consumo responsable, natural y respetuoso con el medio ambiente.
Tribu Woki
Tribu Woki es una marca comprometida 100% con el producto ecológico, para lo que ha creado una cadena de restaurantes y supermercados especializados en este sector. Su filosofía es la de volver a las raíces, pero desde un contexto moderno y actual. Por eso seleccionan los mejores productos mediante métodos tradicionales, y, por supuesto, sin emplear sustancias sintéticas o químicas.
Sus supermercados Organic Markets están repartidos por toda la ciudad, y entre sus peculiaridades, además de la venta de productos, también cuentan con servicio de cafetería y, en algunos casos, de restauración –woks-, que se pueden disfrutar para llevar o en el mismo local.