Teresa Ribera, ministra de Transición Ecológica del Gobierno de España, anunció el fin de los vehículos diésel después de reunirse con José Vicente de los Mozos, presidente de Anfac. Ribera aseguró que el diésel tiene los días contados y que no cuenta con este combustible de cara al futuro. De hecho, considera que la reducción el tráfico en las ciudades así como las prohibiciones en vehículos antiguos es una obligación para la transición ecológica, pero ¿cómo afectarán las nuevas normativas a los usuarios que tienen un vehículo diésel?
Si tienes un coche diésel, de momento no se ha mencionado la posibilidad de prohibir totalmente estos vehículos. Aun así, sus emisiones son muy perjudiciales para el organismo humano. En España existen 17,9 millones de vehículos de todo tipo movidos por gasóleo, la gran mayoría turismos. En furgonetas y camiones, el porcentaje llega al 90% del parque ya que este carburante se traduce en una mayor economía de uso. En autobuses, alcanza el 100%.
Su prohibición no se producirá de un día para otro, pero se prevé que se retiren paulatinamente del mercado. De momento, la única normativa es la de prohibición de utilización de vehículos diésel antiguos en episodios de alta contaminación, como ya se aplica en Madrid o Barcelona.
¿Todos son iguales?
Todavía no se ha hecho una mención especial a los diésel más modernos y que sí cumplen la normativa Euro 6. Para ir reduciendo el uso de estos vehículos se aplicarán medidas de corte fiscal. En primer lugar, se subirán los precios del combustible entre 10 y 15 céntimos el litro.
Aun así, se podría aplicar una nueva tasa o un aumento de la actual tasa de matriculación así como el impuesto de circulación. Aquellos que más contaminen pagarán más. Si acabas de comprar un diésel, habrá que esperar a ver cómo afectan las nuevas medidas.
Alternativas
La caída del diésel es evidente, especialmente después de los escándalos que han salpicado a la industria con el dieselgate. Por ello, la alternativa para la mayoría de conductores es la gasolina, aunque la demanda de híbridos, híbridos 'enchufables' y eléctricos puros ha aumentado considerablemente.
De enero y junio ha crecido un 46,2%, alcanzando los 43.794 automóviles. Un ritmo que multiplica por cuatro el de la demanda global, aunque también es cierto que estos modelos de propulsión alternativa apenas representan un 6% del total.