Shakira 'enamoró' al Palau con su voz y sus caderas

Shakira volvió a Barcelona siete años después y, como era de esperar, no defraudó. La colombiana presentó a su público y "amigos" su nuevo disco El Dorado, aunque tuvieron especial protagonismo las canciones que la catapultaron a la fama. Inevitable, Waka-Waka, Loba, Hips Don't Lie, I Can't remember to forget you o Antología fueron las canciones más coreadas por el público. 

Antes de empezar con el show, la cantante agradeció a su público su espera, debido a los problemas que sufrió en las cuerdas vocales y que obligaron a la colombiana a posponer toda su gira. "Gracias por esperarme, hoy actúo en casa entre familia y amigos" dijo.

El concierto empezó con el tema Estoy aquí, del álbum Pies descalzo", con el que debutó en 1995, para pasar al baile y al espectáculo de una de sus canciones más recordadas, Loba.  

Espectáculo, luces y mucho baile

Pese al nuevo estilo que la de Barranquilla ha ido adoptando durante estos últimos años en sus canciones y letras, la artista siempre  cuenta con canciones más clásicas dedicadas al amor. La cantante internacional mantuvo al público 'enchufado' durante dos horas con sus bailes y un espectáculo lumínico, de fuegos artificiales y efectos especiales sin fin. Además, todas sus canciones estuvieron acompañadas de sus bailes habituales. Sus sensuales movimientos de cadera que caracterizan a Shakira como única. 

Acompañada por su banda, adaptó temas a versión instrumental y otros con la melodía original. Estuvo constantemente en conexión con el público, un público que no falló. 

Conexión Barranquilla-Cataluña

Asentada en Barcelona desde hace más de siete años, la colombiana tuvo un guiño con su público catalán. Demostró un dominio de la lengua exquisito y se dirigió en muchas ocasiones a ellos en catalán, algo que combinó con el castellano para aquellos asistentes hispanos. 

Sin duda, Shakira se ganó a sus fans. Con un lleno casi completo, 16.000 personas, la colombiana repetirá este sábado actuación en el mismo recinto y con las entradas agotadas. Un espectáculo que aguarda su segunda ronda.