Colau prohíbe la pantalla gigante para ver el España - Rusia

El Ayuntamiento de Barcelona ha desestimado la propuesta de la plataforma 'Barcelona con la Selección' de colocar una pantalla gigante en el Camp de l'Àliga para poder ver el partido de octavos de final que enfrentará este domingo a las 16 horas a La Roja y Rusia. Tal y como ha informado la asociación en un comunicado, Ada Colau ha cambiado de idea a última hora pese a su promesa premundialista. 

Antes de iniciarse la andadura de La Roja en el campeonato del mundo, la alcaldesa aceptó colocar una pantalla gigante para los seguidores de la selección en algún punto de Barcelona con una sola condición: que llegaran a octavos. A cuatro días para que se dispute el partido frente a la anfitriona, el consistorio ha decidió tumbar la propuesta. 

"Hartos" de sectarismo del Ayuntamiento

La plataforma ha denunciado públicamente los hechos. Según informan, este miércoles recibieron un mail de Pere Camps, gerente del distrito de Gracia y donde se encuentra el campo de fútbol, en el que desestimaba la petición de la plataforma, una propuesta que "tenía un coste 0 para el Ayuntamiento y que cumplía con el requisito de ser en un espacio de gestión privada".

Pese a los primeros contactos con Gabriel Arranz, Director de Promoción y Eventos Deportivos, para ultimar los detalle del evento los organizadores achacan la decisión al éxito del cosechado entre el partido España - Portugal donde reunieron a 4.000 personas.

Imagen difamada

La organización cree firmemente que el Ayuntamiento no quiere dar una imagen que no les gusta. "Les repele y chirría todo lo relacionado con la palabra 'España' y por ello Colau no quiere permitir que se repita la imagen de miles de jóvenes con banderas españolas por Barcelona mientras ella esté en el Gobierno". 

Pese a esta primera medida, el Ayuntamiento sí ha asegurado que podrán poner pantallas en futuros partidos, aunque 'Barcelona con la Selección' se muestra dubitativa. "No nos extrañaría que, en caso de que pasemos ronda, 48 horas antes nos impongan nuevas exigencias y trabas. Su palabra ha perdido valor".