Este martes se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente. En este día, tanto comunidades internacionales como individuos de todo el mundo trabajan para aumentar la conciencia ecológica sobre la importancia de la conservación del medio ambiente. Un proceso muy necesario dado el aumento de las emisiones de gases nocivos. (España emite más del 4% del bloque comunitario).

Además, también se evalúa el impacto global positivo que tienen las regulaciones y controles medioambientales y se realizan actividades que sirven para educar y mejorar las medidas tomadas en la localidad de cada ciudadano.

Se trata de una parte del Programa Medioambiental de las Naciones Unidas (PMNU) para la creación de conciencia y la acción a nivel mundial para el cuidado del entorno en el que vivimos. La organización está compuesta por los miembros del comité elegidos de varios países que trabajan juntos para impulsar cuestiones ambientales, pero ¿sirve para algo un día como este?

Por qué un Día del Medio Ambiente

La respuesta podría alargarse pero puede resumirse en los siguientes puntos:

  • La emisión de gases nocivos y la reducción de la calidad del aire son dos de los principales motivos por los que se crean acuerdos como el Protocolo de Kioto (especialmente para fábricas) por los cuales se intentan poner en orden las expulsiones de vapores tóxicos como el CO2. En este caso, España se sitúa como uno de los países que mejor cumple el acuerdo (alrededor del 12% de las emisiones globales). Cabe señalar, la mala calidad del aire puede afectar o dañar la salud de los habitantes de todos los países y de los actores del medio ambiente. La excelencia de la atmósfera puede ser degradado por fuentes naturales o artificiales (son las que más daño generan).

 

  • El calentamiento global es un hecho. Los gases emitidos y otros factores han generado un cambio en las temperaturas con un aumento de 2º en la temperatura media del planeta. Esto ha provocado el deshielo de los polos dificultando la vida de animales como el oso polar.

 

  • Los plásticos son los protagonistas de este año, más bien cómo frenar su consumo. Hay que tener en cuenta que cada año se vierten a los océanos hasta 13 millones de toneladas. Y eso no es todo, cada minuto se compran en el mundo un millón de botellas de plástico y cada año se emplean cinco billones de bolsas. Estas escandalosas cifras provocan desastres como que cada año más de 100.000 animales marinos mueran por su causa.