Ya no hay dudas. El incendio que calcinó la cabaña en la que vivía el excantante Juan Pita en Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona) fue intencionado. Así se expresa la policía científica en los informes remitidos al juzgado de Sabadell que instruye esta investigación por supuesto asesinato, un crimen acaecido durante la noche del pasado 12 de enero.
Tal y como adelantó este medio, Juan Cortés y un amigo suyo apodado Jaro prendieron fuego a la cabaña en la que se encontraba la víctima. Horas antes, Cortés contactó vía whatsapp con su exnovia, una joven de 23 años hija de Juan Pita. Andrea Pita vivía protegida en una residencia para mujeres maltratadas a causa de las palizas constantes a las que Cortés la sometía. Este joven le dijo a la muchacha que o volvía con él o mataría a su padre. Aquel día, el 12 de enero, Pita perdió la vida abrasado por las llamas.
No fue un accidente
Los informes técnico-policiales hablan de que efectivamente se trató de un fuego intencionado y no un eventual accidente doméstico.
Juan Cortés ha ingresado en prisión una vez se entregó a los Mossos d'Esquadra que le buscaban por estos hechos y por haber quebrantado en diversas ocasiones una medida de alejamiento de su novia Andrea Pita.
Su padre Juan fue en estrella de la música pop española durante los años 80 del siglo pasado.