La policía busca a Juan Cortés, un hombre de 27 años, miembro de un clan familiar vinculado con el tráfico de marihuana y contra el que pesaban diversas órdenes de alejamiento por reiterados casos de maltrato en la persona de su compañera sentimental, una joven de 23 años vecina de la barcelonesa población de Santa Perpètua de Mogoda.

La policía sospecha que Juan Cortés es el autor de la muerte de Juan Pita Martínez, un hombre de 58 años que el pasado 12 de enero apareció sin vida y calcinado, en la cabaña donde vivía en un terreno agrícola situado entre los términos municipales de La Llagosta y Santa Perpètua de Mogoda.

Mensajes premonitorios

La hija de Pita recibió justo la tarde-noche antes diversos mensajes por parte de Juan Cortés, su exnovio, a quien había denunciado por maltrato en varias ocasiones.

Según ha podido confirmar Crónica Global en fuentes de los hospitales de Mollet y de Sabadell, Juan Cortés habría sometido a su novia a constantes y brutales palizas que, en algunos casos, supusieron el ingreso hospitalario. Esta joven, madre de una niña, fue amparada por los servicios sociales y alojada en una residencia de tutela y protección a las víctimas de malos tratos. Desde la última paliza, la mujer lleva protección policial las 24 horas del día.

Maltratador compulsivo

El pasado 11 de enero, Juan Cortés, obsesionado con su exnovia y sin poder asumir la separación y las órdenes de alejamiento, localizó su número de teléfono y empezó a amenazarla con mensajes ofensivos e insultantes. “No me dices nada… pues ahora lo va a pagar tu padre”, le dijo en uno de sus últimos mensajes vía whats app enviados a primera hora de la tarde de aquel frío 12 de enero, harto de no recibir respuesta.

Horas después, Juan Cortés volvió a contactar con ella y le informó de que acababa de llegar a la cabaña en la que vivía Pita, un hombre que sufría problemas de alcoholismo y esquizofrenia. El mensaje no podía ser más temerario: “El maricón de tu padre no sale y le vamos a quemar”. Esas comunicaciones se producían durante la tarde del 12 de enero.

A primera hora de la tarde del día 13, la hija de Juan Pita, que no había hecho caso a las bravuconadas de su exnovio, se acercó a casa de su abuela, una vivienda situada en la misma población. A ambas les extrañó que Pita no hubiera ido a comer como hacía habitualmente.

Se consumó la amenaza

Fue la abuela (la madre de Pita) la que se personó en el campo donde su hijo vivía en aquella cabaña. Cuando llegó se encontró a varias dotaciones policiales, bomberos y ambulancias: la noche anterior se había producido un incendio en la cabaña que resultó calcinada y había un cuerpo muerto en su interior: su hijo Juan.

La mujer, tras superar el ataque de nervios que sufrió al conocer los detalles de la muerte de su padre, se personó en dependencias policiales y puso a disposición del grupo de homicidios con sede en Granollers todos los mensajes de Juan Cortés. No tenía dudas: su exnovio había cumplido su promesa.

Artista pop

Juan Pita había sido un conocido artista de la movida pop de los años 80. Era el vocalista del grupo Rebeca, y antes lo fue del grupo Boira y de Los Sucesos. Grabó dos LP con cierto éxito pero cayó en el mundo de las drogas y eso fue su perdición. Lo perdió todo y desde hacía años subsistía solo, enfermo, en aquella cabaña, con la ayuda de una paga mensual de asistencia de 400 euros.