Cientos de personas, la inmensa mayoría mujeres, se han concentrado esta medianoche en Madrid para dar comienzo a la huelga feminista con una cacerolada en la Puerta del Sol, donde también se han escuchado consignas como 'aquí estamos las feministas'.
El sonido de las cazuelas y sartenes que portaban las asistentes ha empezado como un leve rumor que ha ido aumentado de volumen según se acercaban las doce de la noche en el reloj de la Real Casa de Correos, iluminado de morado por el Día de la Mujer.
La convocatoria, la primera de una larga jornada de actos y concentraciones en toda España, ha tenido un tono reivindicativo y festivo, sin pancartas ni banderas, pero donde algunas mujeres han blandido fregonas al aire.
"¡Qué viva la lucha feminista!" y "Ni una menos" han sido otros de los gritos feministas compartidos por mujeres de todas las edades ante el silencio cómplice de muchos hombres que se han sumado a la cacerolada.
"¡Qué viva la lucha feminista!"
La afluencia a la concentración ha aumentado después de medianoche con la incorporación de algún pasacalles que había recorrido otras zonas de la ciudad y que ha sido integrado en el acto con aplausos y ovaciones. "Estoy aquí porque la mujer está siendo muy discriminada en todos los ámbitos y el Estado quiere silenciarlas y por eso venimos a hacer ruido para reclamar el lugar que nos corresponde", ha indicado Silvia, estudiante de Almería de 21 años con esterilla en el petate para pasar la noche en un encierro universitario.
Le acompañaba Natalia, de 23 años y estudiante de Trabajo Social. "Hemos venido a hacer ruido para hacer notar nuestra presencia y para reivindicar nuestros derechos, en especial un día como hoy, 8 de marzo. Aunque la nuestra es una lucha diaria. La huelga pretende que se visibilice lo que falta cuando nosotras paramos", ha explicado.
Las dos chicas esperan que la jornada sea histórica. "Va a ser un antes y un después porque va a ser el día en el que las mujeres empecemos a pertenecer a la historia"!, ha proclamado Silvia.
Sin incidentes
El acto que se ha desarrollado sin incidentes y con poca presencia policial, con unos agentes que se han limitado a controlar el escaso tráfico en el kilómetro cero de la capital.
Previamente, unas 200 personas, también mayoritariamente mujeres, se habían congregado de manera espontánea desde las 22.00 horas en los alrededores de la Puerta del Sol protagonizando sentadas en la Plaza de la Villa y en la Plaza Mayor, un lugar donde hace siglos "se quemaba a mujeres", como ha recordado alguna de las asistentes.
Minutos antes de medianoche se han dirigido a la Puerta del Sol para secundar la cacerolada que ha dado inicio al Día de la Mujer más reivindicativo de la historia de España y que celebrará también en Madrid su principal manifestación, desde las 19.00 horas arrancando en Atocha y con destino a Plaza España.