El nuevo violador del Eixample, Francisco Javier Corbacho, ha sido condenado a 66 años de prisión por cuatro delitos de agresión sexual y tres por robo con violencia. Además de la cárcel deberá pagar a las víctimas 110.000 euros en total.

Aunque de los 66 años, el tiempo máximo de cumplimiento efectivo de la condena no será mayor a 20 años y sobre eso se referirán los beneficios penitenciarios.

Una quinta víctima denunció a Corbacho pero al no residir en España no pudo comprobarse el delito de agresión sexual y robo con violencia, por lo que ha sido absuelto de este caso. El nuevo violador ha sido definido durante el juicio como un “verdadero depredador sexual” de mujeres que las asaltaba de madrugada en la puerta de sus casas por el barrio barcelonés del Eixample.