Los atentados de Barcelona y Cambrils (Tarragona), en verano, apenas pasaron factura al turismo en la región. Sin embargo, la Sagrada Familia sí ha notado un descenso de visitantes desde esos 17 y 18 de agosto.
El templo expiatorio recibió el pasado año 4.527.427 visitas, sólo 34.421 menos que las registradas en 2016 (4.561.848). Son números muy parecidos. Sin embargo, la basílica ha notado un descenso de afluencia en la segunda mitad del año al tratarse la Sagrada Familia de un posible objetivo yihadista.
La procedencia
El patronato de la Basílica de la Sagrada Familia ha detallado que uno de cada diez (10%) visitantes de 2017 era italiano; otro, americano (9,7%), y otro, francés (9,2%). Reino Unido representó el 6,4% de las visitas, por delante de los turistas alemanes (6,2 %). Los visitantes españoles ascendieron al 5,8% del total, ligeramente por debajo del 6% conseguido en 2016.
Un 11% de las visitas tuvo carácter benéfico, escolar, pastoral y, en menor medida, de las personas en paro, según las mismas fuentes.