Registro de los Mossos d’Esquadra en una librería del Eixample barcelonés. Al parecer el propietario del establecimiento adquirió un millar de DVD de pornografía infantil a una red que grababa a menores vulnerables.
Esta actuación se enmarca en la segunda fase de la operación Trinity, que desarticuló en 2016 una red que se dedicaba a producir y vender pornografía de menores en riesgo de exclusión en Barcelona, Tortosa (Tarragona), Valencia y Marruecos.
Siete detenidos
Esta segunda fase empezó en noviembre para localizar a los principales consumidores de los vídeos que elaboraba esta red. Según el balance provisional, de momento hay siete detenidos.
La investigación permitió constatar la existencia de 80 víctimas menores, de las que 29 fueron plenamente identificadas.
Para desinhibir a los menores se les hacía ver pornografía heterosexual y los intentaban convencer con otros menores, alcohol y estupefacientes. Les fotografiaban y grababan mientras mantenían prácticas sexuales, muchas veces sin su consentimiento.
Primer aviso en Tortosa
La investigación se inició cuando la Dirección General de Atención a la Infancia y a la Adolescencia (Dgaia) detectó una situación de riesgo en un Centro Residencial de Acción Educativa de Tortosa. Rapidamente se puso en contacto con los Mossos, que constataron que en un piso de esta localidad se estaban grabando escenas de pornografía infantil.
La Unidad Central de Delitos Informáticos comprobó que, además de las grabaciones hechas en Barcelona, Tortosa, Valencia y Marruecos, una buena parte de las imágenes fueron producidas en viajes entre 2000 y 2015 a Sri Lanka, Túnez, Camboya, Laos, Tailandia, Singapur, República Checa, Kenia, Francia y Bali (Indonesia).
Con la información recopilada, entre el 7 y el 25 de julio de 2016 se hicieron seis entradas y registros en Cubelles (Tarragona), Valencia, Xàtiva (Valencia) y Barakaldo (Vizcaya). Se detuvieron a cuatro personas, que ingresaron en prisión tras declarar ante el juez.