Los viejos ficheros con información clasificada han pasado a la historia de cualquier empresa gracias a las tecnologías que permiten almacenar infinidad de datos en plataformas online. Y a pesar de que las ventajas son muchas, también han crecido los riesgos. Eduard Meelhuysen, experto en ciberseguridad y director de Bitglass en Europa, lleva cuatro años trabajando específicamente en CASB (Cloud Acces Security Broker o un agente de seguridad con acceso a la nube) y su tarea se basa en proteger la información de las compañías, que cada vez están más expuestas.
"CASB es hacer seguridad", Bitglass se enfoca en proteger todos los datos que salen de las empresas y se van ya sea a la nube o a dispositivos externos, por ejemplo los de sus empleados. No es algo tan nuevo como parece, explica Meelhuysen: “Hace siete años comenzaron las inquietudes cuando los datos empezaron a irse a la nube. Las empresas siempre han estado enfocadas en la seguridad interna, pero ahora hay otros riesgos”.
Límites del control de datos
El CASB tiene un límite: la privacidad de los trabajadores. “Hacer seguridad para dispositivos móviles es muy difícil”, asegura Eduard. Pero en Bitglass explican que han desarrollado un software que no podrá controlar el dispositivo en su totalidad, sino solo los datos que son de la empresa. “Por ejemplo, si alguien envía su mensaje desde Gmail, desde la cuenta personal, no se puede controlar, pero desde la cuenta de la empresa sí que lo controlamos”.
“La gente quiere trabajar, no se fija en los detalles de la seguridad; cuando quiere bajarse una aplicación lo hace y punto. Cuando las empresas dicen a los empleados que quieren imponer algún tipo de política con relación a sus móviles, ofrecen mucha resistencia. Es por esto que la única manera es protegerlo mediante datos cifrados”, que es lo que hacen empresas como Bitglass. Hay tres lugares donde están los datos: en la empresa, en la nube y en los dispositivos de los trabajadores. “Tenemos todo controlado”, presume Eduard.
Control en la nube
En cuanto al control de la nube, todos los datos pasan por la tecnología CASB de Bitglass --un tipo de proxy--, esto quiere decir que el Cloud Acces Security Broker maneja los datos de la empresa en tiempo real, es como en una casa asegurada con alarmas y sensores que pueden detectar los peligros y prevenir antes de que entre un ladrón.
Empresas como Microsoft tienen alguna forma de seguridad, pero controlar cada aplicación es muy difícil, según Meelhuysen. “En empresas grandes, suele haber unas 1.500 o 2.000 aplicaciones que van a la nube, y controlar cada una de ellas es muy complicado, es por eso que la tecnología que nosotros desarrollamos brinda una solución integral”.
El 90% de empresas, sin seguridad
Para Eduard hay dos formas de empresas: "Unas quieren llegar a la nube, tener Google Apps u otras cosas, pero antes de hacer cualquier proyecto saben que tienen que desarrollar alguna tecnología para protegerse. Otras empresas se van directamente a la nube, y después de un año empiezan a ver problemas. El 90% de las empresas hacen esta segunda opción, es decir, se olvidan de prevenir".
La tecnología CASB empezó a emplearse en 2007 y el primer problema era que sólo se veía que la gente usaba sus propias aplicaciones, pero no se podía saber más que cuántas aplicaciones se tenía. “Desde hace cuatro años nos dimos cuenta de que no importaba bloquear o mirar cuántas aplicaciones se usan, sino que los datos estén seguros, de eso se trata la seguridad de la nube ahora: saber exactamente dónde están los datos de la empresa”.
Ciberseguridad, tarde en España
No sorprende que sea Estados Unidos quien va a la cabeza de la seguridad en internet. En Europa siempre se va de seis meses a un año detrás de ellos, Inglaterra es la primera en el continente, y España está unos dos años retrasada en relación a Estados Unidos.
Aunque Eduard es optimista: “Siempre me ha parecido que España está a la vanguardia de la tecnología porque sus usuarios siempre están preocupados por la seguridad. Y al ver que surgen virus, o problemas con el móvil, está a la vista que es necesario mejorar la protección”.
Bitglass trabaja desde noviembre de 2016 con cinco empresas españolas. Por seguridad, prefiere no dar sus nombres, pero detalla que sus clientes son de sectores como retail, financieras, inmobiliarias, hospitales y farmacéuticas. La compañía de ciberseguridad, con sede en California, tiene hasta el momento 250 clientes en todas partes del mundo. Aunque los expertos dicen que la tecnología CASB, que ahora se aplica al 10% de las empresas, en 2020 llegará a estar en el 85%, cuando casi la totalidad de compañías del mundo habrán tenido que reforzar su ciberseguridad.