El Ayuntamiento de Barcelona ha empezado este lunes las obras de rehabilitación del Turó Parc, en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi, que incluirán mejoras que pondrán en valor el patrimonio natural y escultórico del parque, y también se prohibirá la entrada de perros tras estos trabajos.
El acceso a las mascotas quedará vetado, dado que su presencia ha contribuido al deterioro de algunas zonas del parque, según ha detallado en un comunicado este lunes el Ayuntamiento. A su vez, se explica que se que abrirá una nueva área de perros de más de 1.300 metros cuadrados en los Jardins de Piscines i Esports.
Este espacio contará con zonas de ocio y juegos de agilidad para perros y también espacios para los propietarios, y sus obras empezarán a mediados de noviembre y se alargarán unos tres meses y medio.
Más de 800.000 euros
Las obras del Turó Parc --con una inversión de 806.000 euros-- permitirán que el espacio incorpore mejoras propuestas por vecinos y comerciantes de la zona, y no obligará a cerrar el espacio, ya que incluye áreas en las que no se actúa.
Las mejoras incluyen la rehabilitación del lago para impermeabilizarlo, para lo que se vaciará, se trasladará su fauna a una ubicación temporal --después de las obras se volverán a llevar las especies autóctonas-- y se retirarán las plantas actuales para plantar nuevas de las mismas especies. Las obras recuperarán el antiguo teatro de títeres, que incluirá una programación estable tras los trabajos, y renovarán los juegos infantiles, 101 bancos deteriorados y 47 papeleras.
También se renovarán 3.000 metros cuadrados de caminos de arenisca, 3.200 metros cuadrados de césped y 1.800 arbustos; se plantarán 12 árboles y se podarán otros 100; se mejorará la red de riego, y se mejorará la eficiencia de la aportación de agua de riego con sistemas de control de la red freática. El Turó Parc fue un parque de atracciones entre 1912 y 1929, y fue transformado en un espacio público. El Ayuntamiento lo restauró de forma integral en 2001.