La saturación turística de Barcelona también invade sus playas. La zona de Sant Sebastià, junto al Hotel W, y la Barceloneta, las dos primeras zonas de baño de la capital catalana, superaron los límites de una personas por cada cuatro metros cuadrados este verano. Así lo ha explicado este viernes el comisionado de Ecología del Ayuntamiento de Barcelona, Frederic Ximeno.
Según el estudio presentado por el consistorio, estos dos arenales estuvieron saturados el 45% de días en julio y agosto. Las playas de Llevant, Somorrostro, Nova Icària y Nova Mar Bella también han registrado un número alto de bañistas, aunque mantienen los 10 metros cuadrados por personas. Bogatell y Mar Bella, por su parte, no presentaron saturación.
La playa para perros ha tenido más usuarios que el año anterior. Un total de 18,268 han acudido a la zona habilitada, 5.000 más que en 2016.
Distribuir los usuarios
Ante esta situación, el ayuntamiento ha constituido una mesa municipal para estudiar cómo distribuir mejor los usuarios y que no se concentren todos en Sant Sebastià y la Barceloneta. Entre el 8 de abril y el 30 de septiembre, las playas de la ciudad recibieron 4,5 millones de visitantes.
El consistorio quiere revisar los usos de la fachada marítima y mejorar la conexión de las playas entre sí. En cuanto a la limpieza, los kilos de residuos recogidos, 839.513, se han disminuido un 26% con respecto al año pasado. Sin embargo, las aguas litorales han presentado 62,74 metros cúbicos de residuos flotantes, casi el doble que en 2016.