Cerca de 3.000 venezolanos a la espera de sus pasaportes en Barcelona

Unos 30.000 venezolanos residen en Barcelona, según estimaciones del colectivo Venezolanos en el Mundo. De ese total, un 1% (unos 3.000) se ve afectado por las demoras en las entregas de pasaportes.

A esta situación se suma la incertidumbre en las cancelaciones de los vuelos. El pasado domingo, 30 de julio, aerolíneas como Iberia o AirFrance iniciaron algunas cancelaciones en sus respectivos vuelos a Caracas por motivos de seguridad. De 23 aerolíneas que operaban en Venezuela, solo ocho mantienen la regularidad.

Pasaportes demorados

A la incertidumbre general, a los venezolanos que viven en Barcelona se les complica un poco más el viaje, sobre todo a aquellos que no tienen nacionalidad europea. Unas 3.000 personas están desde enero a la espera de sus pasaportes, lo cual puede implicar problemas a la hora de volver a su país o irse de vacaciones fuera de España.

Jennifer Alfonzo, participante de la organización SOS Venezuela BCN, explica que personalmente ha decidido no renovar su documentación venezolana --tiene pasaporte español-- porque se ha cansado de la burocracia. “Desde el consulado dicen que no hay material para hacer los pasaportes, entonces lo que hacían era darte un papel provisorio, por un año, pero que no te servía para viajar a cualquier parte, en Estados Unidos no te lo aceptaban por ejemplo”.

Respuestas

Desde el Consulado de Venezuela en Barcelona han confirmado que, en lo que va de 2017, “no ha llegado ningún pasaporte, pero ya están en proceso de embalaje una cantidad significativa de los mismos”.

En cuanto a las causas aducen que desde finales de 2016 comenzaron los retrasos en la entrega de esta documentación, a causa de un “bloqueo económico fuerte”. Explican fuentes oficiales que la zona en donde se confeccionan los pasaportes (en Venezuela) pertenece a uno de los 12 municipios en donde hay conflictos, y es también por este motivo que hay demoras.

Incertidumbre en los viajes 

“Terrible” e “incertidumbre” son las dos palabras que utiliza María Fernanda Peraza --médico venezolana, lleva ocho años en Barcelona-- para definir la situación que vive hoy cualquier venezolano, esté dentro o fuera de su país. María Fernanda tiene su padre en Venezuela, quien tiene previsto viajar en septiembre hacia Barcelona, pero teme que su vuelo no esté asegurado. Según supone, puede que “cierren fronteras” en algún momento.

David Díaz, ingeniero ambiental y representante del colectivo SOS Venezuela BCN y coordinador de Venezolanos en el Mundo Barcelona relata que son cada vez más las aerolíneas que, como Iberia, suspenden algunos vuelos a Caracas. “El vuelo del miércoles (2 de agosto) salió con 346 pasajeros, no iba lleno, y eran personas que debían haber viajado antes pero que sus vuelos se habían suspendido”.

Díaz considera que la baja demanda por viajar hacia la capital venezolana se debe a las advertencias tanto de gobiernos como de empresas. “No hay garantías de seguridad, es por esto que incluso personas que deben viajar por trabajo están suspendiendo sus planes. En mi propia empresa --la multinacional British Standars Institutions, BSI-- no se nos permiten viajar”.