Vives guardaba en su caja fuerte sumarios secretos sobre corrupción

Sorpresa mayúscula la que se llevó la Guardia Civil cuando, en el trascurso del registro del domicilio del exconcejal convergente de Barcelona Antoni Vives (imputado en la causa del 3%), aparecieron diligencias secretas de investigaciones judiciales y policiales por corrupción urbanística que, de forma directa o indirecta, le podrían salpicar.

Eso ocurrió el pasado 2 de febrero, cuando agentes de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la comandancia de Tarragona, que investigan el caso 3%, irrumpieron en el domicilio y en la empresa de Vives. Tras su detención, los agentes se incautaron de abundante documentación en soporte informático y diversos libros de notas con reseñas manuscritas de determinadas cuentas o movimientos de dinero en la fundación Trias Fargas, vinculada a CDC. En pleno registro, los agentes localizaron una caja fuerte, y en su interior aparecieron diligencias judiciales de sumarios secretos abiertos por el juzgado de instrucción numero 9 de Barcelona sobre presuntas corruptelas alrededor de la obras de la estación de La Sagrera.

En concreto, Antoni Vives guardaba diversas diligencias, fechadas en 2014, sobre las intervenciones telefónicas a personas relacionadas con la empresa Bimsa, de la que él, en tanto que concejal de Urbanismo, era presidente.

Sumario encontrado por la Guardia Civil en el registro de la casa de Antoni Vives:

De nuevo, la mano de CDC

Las diligencias que escondía Vives hacen referencia a supuestos sobrecostes en las obras que ejecutaba Adif. No sólo eso, también aparecen datos sobre quién y cómo trasladaba personalmente a la sede de Convergència Democrática de Catalunya los datos de las adjudicaciones pendientes de Bimsa.

A partir de la documentación incautada, parece que Antoni Vives tenía especial interés en todo lo que acontecía alrededor de Mariano Vivas Jiménez, gerente de Comsa y de Corsan y persona que llevó el listado de adjudicaciones pendiente de Bimsa a la sede de CDC.

La Guardia Civil inmediatamente puso este hecho en conocimiento del juez de El Vendrell. El informe de los agente policiales subraya cómo la mecánica fraudulenta que se recoge en aquellos expediente judiciales encontrados en el registro del domiclio de Vives coincide con la mecánica criminal por la que esta siendo investigado ahora el exconcejal barcelonés.

Vives no aclaró cómo, gracias a quién ni por qué guardaba esa información reservada y secreta, ya que se negó declarar ante el juez y ante la Guardia Civil.