La pequeña Daniella, hija de Paula Echevarría y David Bustamante, ha hecho la primera comunión y sus papás se han retratado juntos y ufanos. Fiesta gorda en San Vicente de la Barquera (Cantabria) para desmentir de paso que las familias de los separados se lleven a palos. Ampuloso vestido de Rosa Clará el de la niña, que ha comulgado de princesa; atrevido el de la madre, de Dolores Promesas, con escote izquierdo y hombrera derecha. Así es que por un lado parecía Marianne y del contrario, la reina María Cristina. En Hola van a destajo y no dan abasto con la comunión, rematada con un banquete en un restaurante biestrellado con vistas al mar. El padre cantó un Ave María en la misa que se oyó a varios kilómetros a la redonda.
Los famosos no parecen mucho de misas, pero montan unas ceremonias que requieren un cierto despliegue de personal autorizado por la Conferencia Episcopal para la canónica administración de los Santos Sacramentos, así como para el ejercicio de la solidaridad, antes caridad cristiana. El sacerdote Ángel García Rodríguez, más conocido como el padre Ángel, carga con la pesada cruz de la proyección mediática para fomentar las causas de los Mensajeros de la Paz porque se puede escribir recto sobre renglones torcidos, al menos sobre el papel.
El reverendo lleva siempre una corbata colorada para que se note que es cura, pero marxista, según dice, de la facción Cantinflas, de quien tomó el resbaladizo trabalenguas de que no hay que acabar con los ricos, sino que se tienen que acabar los pobres. Eso; y que se mueran los feos.
En el Diez Minutos retratan al mosén con Belén Esteban en una cena de famosos para recaudar fondos. Está el equipo de Sálvame al completo, con la cada día más turgente María Patiño, que se alza los senos con las palmas de manera literal en otra instantánea selfie del paparazzo tertuliano Gustavo González. Photocall de Kikos y Makokes animado por el pater.
Confirmado. Doña Sofía ha perdonado a don Juan Carlos. Semana lo demuestra con unas poéticas imágenes del emérito matrimonio en las que ella, solícita, indica a su esposo las piedras del camino. "La reina Sofía, la mejor 'cuidadora' de su marido", titulan. El padre del Rey tiene buena cara, pero doña Sofía está radiante.