El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha admitido a trámite el recurso que ha interpuesto la empresa Plaro contra el Plan Director Urbanístico (PDU) Gran Via-Llobregat de L’Hospitalet de Llobregat. Un proyecto ambicioso que la alcaldesa del municipio, Núria Marín, ha diseñado para construir 26 rascacielos nuevos.
La compañía barcelonesa, de 25 años de antigüedad, se dedica a la compraventa y explotación de toda clase de fincas urbanas, además de la parcelación y urbanización de terrenos y construcción de fincas en ciudades.
Superficie inferior
Plaro es propietaria de una finca en la zona de Can Trabal, donde el Ayuntamiento de L’Hospitalet planea recuperar 30 hectáreas de área comunal y construir un parque que pretende convertir en el más grande del Área Metropolitana de Barcelona (AMB).
Según ha explicado a Crónica Global Pau Camprubí, miembro de Camprubí abogados y portavoz de Plaro, el recurso ha sido motivado por dos razones fundamentales. La primera, que la superficie de la finca que se le ha adjudicado tras la aprobación del PDU es inferior a la que le corresponde.
“Apretados como sardinas”
La segunda, que se elimina superficie de ocupación para un mayor aprovechamiento del espacio. “Quedamos todos apretados como sardinas para que construyan allí 17 torres de 25 pisos cada una”, sostiene Camprubí.
Explica que, en cuanto se firme la aprobación del PDU, se llevará a cabo la reparcelación y adjudicación de las parcelas resultantes a los que han aportado fincas. Plaro sospecha que hay un “abuso de la Administración”, lo que le ha motivado a acudir al TSJC.
“No se pueden adjudicar parcelas a todo el mundo”, dice el portavoz de la compañía. Y sostiene que espera que la sentencia del tribunal sea satisfactoria para Plaro y consiga una indemnización. Recuerda que el recurso no interrumpe la acción del Ayuntamiento de L’Hospitalet, que podrá continuar llevando a cabo el proyecto.
Horizonte 2027-32
El equipo de gobierno de Núria Marín pretende impulsar la ciudad como una de las arterias principales del AMB mediante la localización de empresas y servicios biomédicos para sumar potencialidad alrededor de los hospitales de Bellvitge y Duran i Reynals.
La propia alcaldesa aclaró que el proceso constructivo no se dará hasta dentro de dos años, posiblemente, en el siguiente mandato municipal, y el final del proyecto será entre 2027 y 2032.