El conde de Centelles intenta hacer caja con uno de los inmuebles más importantes del patrimonio familiar, el palacio condal situado en los alrededores de la ciudad de Vic (Barcelona). Carlos de Llanza ha contratado a la consultora Lançois Doval para gestionar la venta de un edificio histórico en la plaza mayor del pueblo que lleva su apellido heráldico. Pide 1,2 millones de euros.
Se trata de una propiedad del siglo XVI que está declarada como bien de interés cultural de España. Una típica casona renacentista con “bellos jardines privados que se extiende sobre una superficie de más de 1.700 metros cuadrados”, asegura el gestor de inmuebles.
La superficie construida casi alcanza los 3.000 metros cuadrados y la planta es de 745 metros. Cuenta en el interior con un patio central, el antiguo patio de armas, otro de los elementos característicos del edificio.
Transformación en centro asistencial
Robert Menestray, fundador de la consultora, indica en un comunicado de prensa que la “normativa vigente” permite sacar partido al palacio con inversiones en diversos sentidos. “Desde una promoción residencial hasta un hotel con encanto con restaurante de prestigio”, indica en el mismo documento.
La opción preferida para la consultora es transformarlo en un centro asistencial destinado a “clientes de la comarca”. Avanza que esta iniciativa ya está en estudio por parte de “empresas especializadas” del sector. Aún no se ha cerrado la venta.