El ataque informático que sufrió España el pasado viernes, 12 de abril, afectó a los juzgados.
El ciberataque dejó prácticamente paralizado el servicio de notificaciones y buena parte de los traslados de detenidos previstos al menos durante unas 20 horas.
Una portavoz autorizada del Ministerio de Justicia ha explicado a Crónica Global que “la principal preocupación fue solventar las disfunciones producidas por el ataque en los juzgados de guardia”.
El virus informático afectó a la red judicial española el viernes, por lo que ese día, y durante el fin de semana, fueron los juzgados de guardia los que mayor riesgo de colapso albergaron dado que su funcionamiento se prolonga durante las 24 horas del día ininterrumpidamente.
Fin de semana, por suerte
Así, el sábado, el 60% de las oficinas judiciales de guardia ya actuaba con normalidad al surtirle efecto el antivirus. El resto precisó de otras medidas informáticas de choque que en algunos casos se prolongaron hasta el lunes.
A partir de ese día, la normalidad se instaló de nuevo en la red judicial española.
Fuentes del ministerio hablan, pues, de afectación de baja intensidad, pero reconocen que, de haberse producido ese ataque en cualquier otro día a que no correspondiese con el fin de semana, la repercusión hubiera sido exponencialmente superior y mucho más grave.
No se ha podido cuantificar el volumen de notificaciones, traslados, lanzamientos judiciales o comunicaciones penitenciarias que se vieron interferidas por el virus durante esas 20 horas en la red judicial española.