El caso Adigsa llegará a juicio el próximo mayo. Los tribunales analizarán la presunta trama de comisiones ilegales forjada alrededor de la empresa pública de la Generalitat que se encargaba de la construcción de vivienda social en el último Gobierno de Jordi Pujol. Salpica a un empresario, José Antonio Salguero. El único que compareció ante la fiscalía para reconocer el pago de mordidas. "Fui víctima del chantaje al que me sometió CDC: o pagaba, o no cobraba", asegura en declaraciones a Crónica Global.
El ministerio público pide para él 15 meses de cárcel por pagar una comisión a los intermediarios que le consiguieron 18 contratos menores de remodelación de vivienda pública en 2003. El montante total de estas licitaciones era de 661.000 euros. Tuvo que falsificar las facturas para incrementarlas un 20%. Esa diferencia se la pagó a José María Penin, el "conseguidor de Adigsa".
La soledad de Salguero
Lo reconoció ante la justicia, la fiscalía y la policía de Barcelona hace 15 años. Lo máximo a lo que pudieron aspirar los investigadores del caso. En el Parlamento catalán, el expresidente Pasqual Maragall le había espetado al entonces jefe de la oposición, Artur Mas, una de sus frases más célebres: "¡Usted tiene un problema y se llama 3%!".
El único que dio la cara fue el joven constructor. Su denuncia sonó casi estentórea en medio del llamado oasis catalán. Nadie se imaginaba en ese momento la dimensión que ha alcanzado 15 años más tarde el caso 3%.
- A pocos días del juicio, ¿cómo se encuentra?
- Animado. Confiado y un poco harto por el dinero que he perdido durante estos años y por lo injusta que resulta la justicia.
- En este juicio, ¿estarán todos los que participaron en ese contubernio de corrupción que se urdió alrededor de Adigsa?
- ¡No, qué va! --sonríe--. ¡Qué va! Faltan muchos. Como, por ejemplo, el expresidente de la empresa pública Ferrán Falcó, entonces diputado de CDC.
- A Falcó se le exculpó en fase de instrucción.
- Le exculpó en un auto increíble la juez Nuria Bassols. La esposa de Josep Manuel Bassols, uno de los imputados del caso 3%.
- ¿La juez prevaricó?
- La juez sabía que Falcó estaba al corriente de lo que había sucedido. Supo y toleró el chantaje que me hicieron. La magistrada lo conoció porque estaba acreditado, pero buscó darle la vuelta a todo para poder exculparlo en el juicio. Una vergüenza.
- Por lo tato, junto a usted no se sentarán todos.
- Efectivamente. Son todos los que están, pero no estarán todos los que son.
- ¿Se siente cabeza de turco?
- Sí. Me siento víctima de la extorsión de esa gente. Y lo que más de duele es que ninguna formación política ha pedido la revisión del caso Adigsa.
- ¿La fiscalía le ha llamado a declarar por el 'caso 3%'?
- Sí. Ahora, casi 15 años después. Ahora se han acordado de mí.