El exconsejero de Salud de la Generalitat Boi Ruiz (CDC) eliminó la pediatría del hospital donde murió la niña de ocho años el sábado tras esperar una ambulancia medicalizada durante dos horas y media. Ruiz suprimió el servicio del Hospital Comarcal de Blanes (Girona) en 2011. La decisión provocó fuertes protestas, manifestaciones y la recogida de 12.000 firmas contra los recortes.
Según han explicado fuentes cercanas a la institución médica comarcal, que forma parte de la Corporació de Salut del Maresme i La Selva, la pérdida de especialidades fue paulatina. En octubre de 2011, la Consejería de Salud recolocó las unidades de ginecología y obstetricia en el Hospital Sant Jaume de Calella.
En paralelo, se recortó el servicio de ambulancias de traslados interhospitalarios y el departamento también se llevó la cirugía al centro vecino.
Ahorro de 64 millones
Las medidas formaban parte del llamado Plan de Reordenación Asistencial y Territorial (RAT), con el cual el departamento quería centralizar servicios en las instituciones médicas públicas de Cataluña y, de paso, ahorrar 64 millones de euros.
La consejería justificó la hoja de ruta en aras de conseguir una mejor eficiencia del sistema sanitario.
Protestas
La implementación del plan provocó un alud de quejas en Blanes. El comité de empresa del Hospital de Blanes avisó en 2011 que los traslados entre hospitales "generarían retrasos y pérdida de calidad asistencial".
Hubo más. La parte social congregó a 1.500 personas en una manifestación en la localidad el 13 de agosto de 2011. Después, hubo varios cortes de tráfico.
En paralelo, dos entidades sociales, Units pel CAP y la Plataforma Ciutadana de Blanes, entregaron 12.000 firmas a la delegación de Salud en Girona contra los recortes.
El 6 de octubre de 2013 se produjo la mayor protesta, cuando 4.000 personas tomaron las calles del municipio gerundense para protestar contra el tijeretazo de Salud.
"Faltan recursos"
Sólo los médicos del hospital pueden determinar si los recortes acometidos por Boi Ruiz en la institución médica podrían haber evitado la tragedia del sábado.
Por lo pronto, CCOO pide prudencia y estudiar caso a caso. A nivel general, el sindicato sí insiste que un hospital de segundo nivel como es el Comarcal de Blanes "debería ser capaz de estabilizar a un niño en estado crítico con un cirujano de guardia, anestesista y un pediatra".
Si no los tiene, como es el caso de Blanes, "es porque estas especialidades se desmantelaron en 2011".
Traslados forzosos
Así las cosas, los hechos son que las urgencias pediátricas de Blanes se tienen que derivar ahora al Hospital Sant Jaume de Calella (Girona).
Las casos médicos pediátricos críticos, a su vez, se derivan al hospital provincial de referencia, el Josep Trueta. Dichos traslados deben hacerse con una ambulancia medicalizada pediátrica, un servicio que el hospital gerundense no tiene.