Ismael, el cazador de Aspa: “Les disparé por un acto instintivo”

“Disparé a los agentes en un acto instintivo”. Ismael Rodríguez, el cazador de Vacarisses (Barcelona) que acabó con la vida de dos agentes rurales en un coto de caza en Aspa (Lleida) este sábado, ha declarado ante Mossos d’Esquadra que no recuerda la sucesión de hechos que desencadenaron el doble homicidio.

Ha afirmado que no es consciente de haber vaciado la escopeta de cartuchos que permite un máximo de tres disparos seguidos. Se trata de un arma cara y de uso complejo, un Benelli, por el que no tenía permiso vigente. La falta de licencia en curso exponía al cazador a una alta sanción.

Sufrió un shock

Rodríguez ha señalado a los agentes catalanes que sabe que los dos rurales le dieron los buenos días y que le pidieron que descargara el arma. En ese momento estaba solo, ya que sus compañeros de expedición de caza estaban dispersos por el coto en búsqueda de presas. No sabe, según mantiene en la declaración inicial, qué le pasó por la cabeza ni en qué momento apuntó a las dos víctimas a la cabeza.

Fuentes de la defensa han afirmado a la agencia EFE que está muy arrepentido del crimen. Sufrió shock. No está provocado por ningún fármaco. No había tomado nada antes de iniciar la caza ni está bajo tratamiento de ningún tipo de enfermedad.

Comisaría de Lleida

Tras recuperarse de lo sucedido, se desplazó hasta el lugar en el que se encontraban el resto de compañeros del grupo. Fueron ellos los que le convencieran que llamara al número de emergencias, el 112, y confesara el crimen. No intentó escapar en ninguno de los momentos.

Rodríguez permanece aún en la comisaría de Mossos de Lleida. Se espera que pase a disposición judicial posiblemente el lunes.