A un hombre le hacen un tatuaje en el Mulafest de Madrid / EFE

A un hombre le hacen un tatuaje en el Mulafest de Madrid / EFE

Vida

Europa alerta de que los tatuajes pueden causar cáncer

Un informe de la Comisión Europea advierte de que la tintas empleadas, destinadas a la industria de la goma, el aluminio y el textil, pueden liberar sustancias cancerígenas

10 enero, 2017 13:22

La Comisión Europea ha publicado recientemente un informe en el que, bajo el título Seguridad de los tatuajes y maquillaje permanente, se alerta de que ciertos componentes de la tinta de los tatuajes pueden liberar sustancias cancerígenas. Además, se avisa de que muchos no están elaborados para su uso cosmético.

Actualmente, y aunque las tintas se inyectan en la dermis, no existe una legislación específica en la Unión Europea sobre los tatuajes de larga duración, pero sí sobre los productos cosméticos. Ello puede resultar grave si se tiene en cuenta que el 12% de la población tiene algún tatuaje y que la “mayoría” de sus componentes no están autorizados para ese uso.

Cáncer de vejiga

De hecho, en el trabajo, se refleja que más del 80% de los colorantes utilizados son orgánicos y, de ellos, más del 60% son pigmentos azoicos. Estos, en algunos casos, pueden liberar aminas aromáticas, relacionadas con algunos tipos de cáncer como el de vejiga. Estas sustancias suelen emplearse en las industrias de la goma, el aluminio y el textil.

"En Europa se han encontrado tatuajes que contienen productos químicos peligrosos como, por ejemplo, hidrocarburos aromáticos policlíclicos (43%), aminas aromáticas (14%), metales pesados (9%) y conservantes (6%). Además, en un 11% de los casos que se han analizado se ha detectado contaminación microbiológica", señala el informe.

Reacciones décadas después

Y es que, estos componentes se pueden degradar por la exposición solar, la radicación ultravioleta o láser. En este sentido, hasta un 5% de las personas tatuadas pueden sufrir una infección bacteriana, alergias agudas o hipersensibilidad retardada. Estas reacciones que pueden parecer hasta décadas después de realizarse el tatuaje, provocando la aparición de patologías autoinmunes subyacentes.