Freno en el crecimiento de la brecha entre barrios ricos y pobres de Barcelona. Las desigualdades económicas entre ellos no se han equiparado, pero sí han dejado de crecer por primera vez desde 2007. Son datos del Informe de la Renta Familiar Disponible por cápita de 2015, presentado este lunes en el Ayuntamiento de Barcelona y que certifican que la renta bruta anual ha crecido un 3% y se sitúa en los 19.775 euros.
El primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, ha celebrado la noticia en rueda de prensa, aunque se ha apresurado a remarcar que “la tijera no continúa abriéndose, pero el reto es cerrarla”. Asegura que se trata de unos resultados importantes porque se da una polarización de la renta familiar media y el un refuerzo de la situación económica de la ciudad.
Nou Barris vs. Sarrià
“El aumento de la ocupación es, fundamentalmente, lo que ha incidido en esta mejora”, ha dicho. Nou Barris sigue manteniéndose como el territorio que tiene menos renta de Barcelona, ya que los datos confirman que ha dejado de caer. Sarrià-Sant Gervasi continúa estando en la posición extrema.
Las rentas más abundantes en la Ciudad Condal siguen siendo las medias, que corresponden a un 44,2% de la población. “Barcelona continúa siendo una ciudad con unas rentas medias fuertes y, allá donde esto ocurre, hay democracias fuertes”, aseguraba Pisarello.
La periferia, más pobre
Según el director del Gabinete Técnico de Programación, Ramón Canal, el informe se centra en analizar variables laborales, educativas, consumistas y de situación patrimonial de los ciudadanos de cada uno de los 73 barrios de la capital catalana.
Los barrios con menos renta son los periféricos y con una población menor, como el Besós o la Marina del Prat Vermell, situado en el distrito de Sants-Montjuïc. Canal ha destacado el avance de Ciutat Vella, que ha pasado de ocupar el noveno puesto al sexto en el ranking, y Pisarello lo ha atribuido a una movilidad de la población.
Aumento del alquiler
“Hay una movilidad de población: cuando hay una mejora de la situación en materia de rentas en barrios así, se produce un éxodo de población que va a otros distritos”. Es el caso de Ciutat Vella, que está recibiendo a personas con rentas más altas, lo que provoca otro fenómeno preocupante para el equipo de gobierno de Ada Colau: el aumento de los precios de la vivienda, sobre todo, en el barrio Gótico.
Para conseguir el reto de cerrar la tijera, el teniente de alcalde ha recordado la necesidad de atender a cuestiones que no aparecen en estos estudios, como son las desigualdades salariales, los sectores vulnerables como las personas mayores o los que llevan demasiado tiempo en paro y las condiciones precarias del trabajo actual, entre otros.