Unos 1.100 inmigrantes subsaharianos han intentado asaltar esta madrugada el perímetro fronterizo de Ceuta, de los cuales solo dos han conseguido entrar.
La Delegación del Gobierno ha destacado que los inmigrantes, que iniciaron el asalto a las 4.20 horas, han agredido tanto a las fuerzas marroquíes como a los agentes de la Guardia Civil, y que han resultado heridos cinco agentes de la Unidad GRS de la Guardia Civil y 50 miembros de las Fuerzas Auxiliares marroquíes.
En la zona central
Como en las últimas ocasiones, y por la zona de Sidi Ibrahim, ubicada en la zona central del perímetro que delimita la frontera terrestre entre España y Marruecos, los asaltantes han intentado acceder de "forma extremadamente violenta y organizada, tratando de forzar algunas de las puertas del vallado exterior, utilizando para ello barras de hierro, cizallas y piedras de gran tamaño".
La colaboración de las fuerzas armadas marroquíes tuvo como resultado evitar que unos 500 inmigrantes llegaran a la valla y el resto, unos 600, logró alcanzar la misma, donde fueron contenidos por los agentes de la Guardia Civil desplegados en la zona con la ayuda de las Fuerzas marroquíes.
Despliegue de medios
Además, se contó con la colaboración en el dispositivo de unidades de la UIP y UPR del Cuerpo Nacional de Policía, así como con el apoyo de un helicóptero de la Guardia Civil.
Tras la contención del asalto, quedaron encaramados a la valla exterior 106 subsaharianos, de los cuales, tras su examen por los servicios sanitarios de Cruz Roja y 061, se procedió a rechazar a 104 y dos fueron trasladados al hospital por heridas graves.
Dados de alta
Estos dos únicos inmigrantes subsaharianos que lograron entrar ilegalmente en Ceuta tras el asalto masivo ya han sido dados de alta en el Hospital Universitario de Ceuta.
Según han informado a Efe fuentes del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA), uno de los inmigrantes presentaba una luxación mientras que el segundo de ellos precisaba puntos de sutura por un corte.
Al CETI
Ambos fueron evacuados en una ambulancia desde el perímetro fronterizo hasta el clínico civil, después de ser atendidos en la misma frontera por el personal sanitario desplazado al lugar.
Los dos subsaharianos han sido llevados al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), como sucede de forma habitual en estos casos.