Alumnos de quinto de primaria del colegio Virolai, que sufren las temperaturas extremas y critican a Cambray / CG

Alumnos de quinto de primaria del colegio Virolai, que sufren las temperaturas extremas y critican a Cambray / CG

Vida

Cómo recuperar 12 años perdidos del informe PISA

Unos 11.000 alumnos de 89 colegios españoles han adoptado el programa educativo Jump Math, basado en la comprensión de los conceptos

14 diciembre, 2016 19:04

“No estoy hecho para las mates”. Es una frase común entre los alumnos a partir de los 10 años. Los resultados del informe PISA, el Programa de Evaluación Internacional de Estudiantes, hechos públicos hace una semana confirmaron que las matemáticas son una de las asignaturas pendientes en los colegios españoles. El programa educativo Jump Math, sin embargo, quiere demostrar que están al alcance de todos.

Se trata de una nueva forma de encarar las matemáticas en clase, basada en la comprensión de los conceptos en vez de aprender de memoria a resolver problemas. Unos 11.000 alumnos de 89 colegios ya lo han incorporado; en Cataluña, son 5.000 estudiantes de 22 escuelas. Una ONG canadiense lo creó y, tras los resultados observados en centros del país, Estados Unidos y el Reino Unido, llegó a España hace dos años.

Sin dibujos ni colores

El libro de Jump Math es en blanco y negro. “Nos basamos en la ciencia cognitiva, que demuestra que con dibujos y colores, la lección se entiende peor”, explica el director del programa en España, Miquel de Paladella. De sus ventas sacan la financiación. Son 30 euros, aunque los alumnos de escuelas que aplican el plan pedagógico tienen un descuento de nueve euros.

Dos alumnas de quinto de primaria del colegio Virolai, durante la clase de matemáticas / CG

Dos alumnas de quinto de primaria del colegio Virolai, durante la clase de matemáticas / CG

El sistema se fundamenta en pequeños retos, que el alumno tiene que conseguir con la guía del profesor. Al principio, no convence a todos los docentes. “En un primer momento, no nos gustaba, pensábamos que estaba todo muy pautado y que no dejaba libertad al maestro”, explica María del Carmen Sáez, la coordinadora del ciclo inicial y medio del colegio Virolai de Barcelona, uno de los que ha adoptado el programa.

Tras un año de experiencia, su idea ha cambiado: “Al final, lo que hemos visto es que los estudiantes tienen herramientas para resolver un mismo problema de diferentes formas, que piensan por si mismo y ganan intuición matemática”.

Dos puntos más de media

Las pruebas del PISA, que se hacen cada tres años, dejaron al descubierto que el 22% de los alumnos españoles tienen un nivel 1 en la asignatura, lo que significa que “no pueden participar en la sociedad moderna”. Solo el 7% está en los niveles más altos, el 5 y el 6, los que podrían “acceder a carreras científicas y técnicas”.

Desde 2003, los resultados obtenidos están estancados. “Cada vez que se hacen las pruebas decimos lo mismo: son tres años más perdidos”, asegura Paladella. Nueve colegios públicos de Barcelona fueron los primeros en España en implantarlo. Fue en el curso 2013-2014, y los resultados muestran que los suspensos disminuyen notablemente y que la nota media sube dos puntos.