Una mujer que se ocupe ella sola de las tareas domésticas tiene más probabilidades de ser infiel a su marido, según un nuevo estudio francés que ha recogido el rotativo The Telegraph.
Una encuesta a 10.000 esposas inscritas en la web Gleedon --mujeres casadas pero infieles-- sugiere que la mejor manera de ganarse el corazón de una mujer es ayudándola a planchar, lavar los platos o pasar la aspiradora. El 73% de las mujeres interrogadas aseguraban que decidieron cometer una infidelidad por la ausencia de su cónyugue en las tareas del hogar.
El portal Gleeden, que empezó en Francia pero que ya opera en diversos países, lanzó la amplia encuesta en un intento de identificar la razón clave por la cual las mujeres estaban tentadas a echar una cana al aire. El motivo aclaparador fue "no ayuda bastante en el día a día de la casa".
El 84% se discuten por las tareas
El 86% de las encuestadas confesaban estar profundamente frustradas por la situación, mientras que el 84% reconocían que la tendencia de sus maridos de evitar coger el mocho o preparar la cena habían sido motivos de discusión. "Las mujeres sobrecargadas de tareas soñaban con olvidar los guantes de goma en los brazos de otro", explica la encuesta.
Todas las estadísticas demuestran que las mujeres de todos los países de Europa siguen ocupándose de las tareas domésticas en una proporción mucho mayor que sus compañeros masculinos. Pese a que ha habido mejores en los últimos años, la diferencia sigue siendo motivo de discusión e, incluso, divorcio.