La tele es una tómbola y lo mismo salta la liebre en Sálvame que en Espejo Público, la sesión matinal de Dj. Susanna Griso en Antena 3, una cadena familiar. A las horas en que se emite el magazine los niños están en la escuela y el público en general, a sus faenas. Buscan captar la atención de las amas de casa y a fe que las deben tener acojonadas con el triste caso de la desaparición de Diana Quer, las criminales peripecias del pederasta de Ciudad Lineal o nuevos datos, un suponer, de la matanza de Puerto Hurraco, del 26 de agosto de 1990. Tampoco hace tanto.
Este lunes, el puntazo del programa ha sido una entrevista con Ignacio Allende, alias Torbe. La primera que concede el creador de la página para pajilleros compulsivos llamada Puta Locura, subraya orgullosa la web de Antena 3. Una oportunidad para que, tras salir de la cárcel bajo fianza, pueda clamar por su inocencia y proclamarse víctima de una trama urdida por una supuesta novia ladrona y despechada. "Edificante" testimonio. No sabía que era menor de edad, y ella, pérfida, utilizó la documentación de una amiga. Allende, que pide "llámame Torbe", arrastra las acusaciones de difusión de pornografía con menores y trata de blancas. Cree que es como Larry Flynt, un incomprendido pionero de la libertad de expresión en la era digital.
Juan Carlos Monedero, el coco de Podemos, está escandalizado. Aún no se explica cómo hemos llegado a semejante deterioro audiovisual: "Lo que pasa en nuestras sociedades es estructural. ¿O crees que si le das a la gente de desayunar miedo y Gran Hermano, Sálvame y Hormiguero va a recitarte por la noche a César Vallejo y a reflexionar como Aristóteles?". Así se explica Monedero el triunfo de Trump en su blog del diario Público, una sobredosis en versión norteamericana de telerrealidad, telebasura y teleles. Fácil. Si el resultado hubiera sido otro, la culpa no sería de la televisión.
La gente se merece, según el asesor bolivariano, debates en La Sexta, Salvados, especiales Ferreras, La Tuerka de Teleteherán y Polònias. Pobre, la gente, que podría reflexionar como Aristóteles y se engancha a Jorge Javier, el pensador erróneo.
Otro pensador es Donald Trump, que ha concedido su primera entrevista como presidente electo. Lesley Stahl fue la periodista que entrevistó a la familia casi al completo (faltaba el pequeño Barron, al que apodan "Little Donald") en el 60 Minutes de la CBS. Zanahorio ha suavizado su discurso pero Ivanka le mira de tanto en cuanto con cara de "cállate de una fucking vez". Dos momentos destacan de la entrevista. Trump protesta contra el acoso a musulmanes y latinos tras su victoria. "Stop it!", declara a cámara el homínido híbrido entre John Wayne y Charlton Heston. Y cuando Stahl le pregunta si mantiene la idea de construir un muro con México, Trump se ratifica con una declaración tipo Huevos de oro, la película de Bigas Lunas. "Créame, soy muy bueno en eso; se llama construcción". Trump, güero pendejo.