El 37,7% de los ciudadanos de Barcelona paga por una póliza de sanidad privada, lo que significa que cuenta con doble cobertura sanitaria, puesto que también dispone de la pública. Son algunos de los datos presentados este martes por el equipo de gobierno de Ada Colau, en rueda de prensa en el Ayuntamiento de Barcelona.

Sin embargo, solo el 20,5% de los servicios sanitarios que se prestan en Barcelona corren a cargo de empresas privadas: un 9,4% desde sociedades sin ánimo de lucro y un 11,5% desde compañías con ánimo de lucro. Es decir, que solo la mitad de los barceloneses con posibilidad de recurrir a una mutua se deciden por ella cuando necesitan acudir al médico; el resto va a la pública.

Entre los barceloneses que tienen doble cobertura sanitaria, se da una alta variabilidad entre distritos que probablemente tiene relación con la renta. En el distrito de Sarrià-Sant Gervasi, considerada como una de las zonas acomodadas de Barcelona, solo el 32,9% de los ciudadanos usan únicamente la asistencia pública, una proporción que asciende hasta el 81,3% de Ciutat Vella.

 

Más contaminación

“Mejorar la salud pasa por combatir las desigualdades en nuestra ciudad” ha dicho la tercera teniente de alcalde de la capital catalana, Laia Ortiz. “Lucharemos para conseguir una Barcelona más equitativa y más justa” ha añadido. Ortiz ha informado de que una de los principales retos en salud del ayuntamiento es la contaminación del aire, provocado principalmente por el tráfico pero también por “otros factores a nivel climático o la actividad del Puerto, debido a la actividad de los cruceros”.

En la ciudad condal, la calidad del aire empeoró entre 2014 y 2015, cuando se registró un aumento del 11% del dióxido de nitrógeno (NO2) –se ha superado el límite legal--, de un 13% las partículas en suspensión de diez micras, y de un 16% las partículas finas, de 2,5 micras. La comisionada de Salud, Gemma Tarafa, ha avisado de que la contaminación provoca “muertes, más hospitalizaciones y el deterioro en el desarrollo cerebral. No es que aumente la contaminación, sino que tiene un impacto en la salud y debe revertirse en la medida que podamos”.

Adicciones

Sobre la salud mental, el informe presentado bajo el nombre de La salud en Barcelona 2015 pone de manifiesto que, donde la situación económica es peor, son más elevados los porcentajes de malestar, ansiedad y sensación de estar deprimido. En los centros de salud mental para personas adultas se atendieron 44.953 visitas, mientras que en los de menores y jóvenes se atendieron 12.066, lo que indica un aumento respecto al año anterior.

También se incrementa el número de personas que solicitan ayuda para llevar a cabo un tratamiento de desintoxicación, en concreto relacionado con el alcohol y la cocaína. En los Centros de Atención de Seguimiento (CAS), se registraron 4.430 inicios de tratamiento en 2015 (en 2014 fueron 4.252). Los tratamientos para dejar el alcohol ocuparon un 48% del total y, para dejar la cocaína, un 16%.

Medidas

La comisionada de Salud ha anunciado soluciones como el Plan de Salud Mental, compuesto de 109 medidas y para el que se destinan 52 millones de euros, dedicado a seis distritos prioritarios con una menor renta: Horta-Guinardó, Nou Barris, Sant Andreu, Ciutat Vella, Sants-Montjuïc y Sant Martí. También ha anunciado al presentación en las próximas semanas del Plan de Acción para reducir la contaminación y la destinación de 300.000 euros para combatir las enfermedades de transmisión sexual.

Tarafa ha remarcado, además, que en Barcelona hay un total de “250 camas cerradas o en uso estacional a los que hay que darles salida”. El informe desvela que las camas disponibles en los hospitales públicos son 3.705 para dar cobertura a toda la ciudad.