Barcelona ha perdido a un 12% de los vecinos nacidos en el resto de España en apenas ocho años. El Ayuntamiento ha revelado el sábado que los ciudadanos que declaran su lugar de nacimiento en otros lugares de la Península se ha encogido del 30% al 18% desde 2008. Según la Lectura del Padrón Municipal [consultar aquí], es el colectivo de barceloneses que más rápido se reduce.
Comparado con el resto de poblaciones, el número de barceloneses procedentes de otras comunidades autónomas cae de forma sostenida. Los encuestados que han nacido en la ciudad son el 52% del total, según el estudio. Por su parte, los extranjeros alcanzan el 22,5%. Los vecinos nacidos en otras partes de Cataluña se mantienen estables en torno al 7,5%.
"Desde el año 2008, las personas nacidas en el extranjero superan a los nacidos en otros puntos de España. Este colectivo registra la caída más acentuada, pasando del del 30% al 18% en este periodo", revela la investigación.
Dominan los italianos
El Ayuntamiento de Barcelona también ha revelado las cinco nacionalidades de ciudadanos extranjeros más comunes en Barcelona. La población foránea de la Ciudad Condal se ha reducido en 27.000 personas en cinco años. Aún así, a uno de enero de 2016 los barceloneses nacidos fuera de España sumaban el 16,5% del padrón.
Cinco pasaportes son los más comunes entre los ciudadanos que se han instalado en la capital catalana procedentes de otro país. Italia (26.993 personas), Pakistan (19.192), China (18.448), Francia (13.671) y Marruecos (12.552) copan el top 5.
Población estable
El trabajo concluye que los habitantes de Barcelona a principios de año sumaban 1,6 millones. La cifra se mantiene constante por primera vez en varios periodos, agregan los investigadores.
El análisis del padrón también concluye que el censo poblacional de la mayor ciudad catalana envejece: la edad media llega a los 44,0 años.
Hasta 702 vecinos, sostiene el documento, tienen más de 100 años.