"Jamás vi una conjunción de hechos tan aberrantes", ha dicho la fiscal impactada por el caso de Lucía Pérez, una argentina de 16 años que fue agredida sexualmente hasta que murió.
La funcionaria, María Isabel Sánchez, informó que Lucía fue drogada con marihuana y cocaína y, mermada su voluntad, "violada vía vaginal y anal, no solo por el hombre que lo hizo sino también utilizando un objeto romo, como pudo haber sido un palo". Eso, aseguró, "motivó el reflejo vagal que mató a Lucía”.
El "reflejo vagal" al que se refiere la fiscal es la reacción, y en este caso fatal, que se produce al introducir algo por el aparato digestivo. Es la respuesta al contacto del nervio vago, o nervio pneumogástrico, el más importante del cuerpo, que va de la boca al recto.
Protestas ciudadanas
El caso de Lucía, que tuvo lugar la semana pasada en la ciudad costera de Mar del Plata, se produjo solo días después de que una protesta de decenas de miles de mujeres en Rosario fuese reprimida con balas de goma y gases lacrimógenos.
Asimismo, se produce cuando diversos casos de violencia criminal, entre ellos varios feminicidios, y el aumento de las incautaciones de narcotráfico han aumentado la sensación de inseguridad en un país particularmente sensible a la violencia, uno de los que registra menos homicidios en América Latina.
Entregado en el hospital
La fiscal Sánchez informó que el cuerpo de Lucía fue dejado en un hospital de Mar del Plata, recién bañado y vestido, como si los agresores hubiesen intentado mitigar las consecuencias de sus actos. O, como sospecha la familia, tratando de hacer creer que era un caso de sobredosis. Sin embargo, los morados y pruebas de ADN del cuerpo, así como a los objetos incautados, probaron una "agresión sexual inhumana".
Según la familia, Lucía fue "entregada" a uno de los agresores por una compañera de la secundaria, donde cursaba el último grado. La fiscal sospecha, no obstante, que la joven mantenía una relación de amistad o amorosa con el presunto agresor.
"Esa chica (Lucía) no era una consumidora habitual. La niña fue a la casa voluntariamente y una vez allí ya fue presa de la voluntad de los autores del hecho", afirmó la fiscal.
Dos detenidos
Matías Farías, de 23 años de edad, y Juan Pablo Offidani, de 41, fueron arrestados el domingo en la casa donde se cree ocurrieron los hechos un día antes. La fiscal ordenó la detención de un tercer presunto agresor.
El automóvil en que dejaron a la víctima en la unidad médica había sido visto en las cercanías de la escuela, dijo la fiscal, quien alertó de la presencia de vendedores de droga cerca de los colegios.