La inauguración de la polémica exposición Franco, Victoria y República. Impunidad y espacio urbano en el Born Centre Cultural i de Memòria de Barcelona ha generado tensión entre los vecinos hasta el punto de la agresión. Atrás quedan los huevos lanzados contra la estatua ecuestre decapitada del Caudillo en las horas previas, obra de Josep Viladomat. Según ha captado Crónica Global, algunos ciudadanos se han enzarzado a las puertas del recinto en el momento de la apertura de la galería, en la tarde del lunes.

Un grupo de jóvenes de las Joventuts d'Esquerra Republicana (JERC) y de las Joventuts Nacionalistes de Catalunya (JNC), contrarios a la exposición, también han intentado entrar, sin éxito, en la galería. Sí han pasado las cintas de seguridad y se han acercado hasta dos de las estatuas que se erigen en el exterior. Una de ellas es la mencionada figura ecuestre de Franco. Ante las esculturas, han desplegado sendas pancartas contrarias a los símbolos exhibidos.

Escritos a mano

"Franco, ni en el Born ni en ningún lugar", decía el escrito de JNC, pintado a mano sobre una tela. También pintado, pero más pulido y a dos colores --rojo y negro--, era el escrito de las JERC: "Fuera franquistas de las calles". Este grupo también ha colgado una estelada en la estatua de La Victoria, obra de Frederic Marès.

En la escena no podía faltar el punto de épica y de drama. Uno de los jóvenes revolucionarios, ataviado con un respirador artificial, se ha desmayado tras ser empujado por sus propios compañeros en el primer intento de acceso a las estatuas.

Los hechos han interrumpido el discurso inaugural del primer teniente de alcalde de Barcelona, Gerardo Pisarello.