El presunto yihadista detenido el lunes en Alemania gracias a la colaboración de dos refugiados sirios se ha suicidado en la celda en la que estaba preso. Jaber Albakr, ciudadano sirio de 22 años, había empezado una huelga de hambre y se encontraba bajo vigilancia en la cárcel de Leipzig por el alto riesgo de que se autolesionara.   

Los investigadores alemanes creen que el joven planeaba un atentado en nombre de Estado Islámico en varios sitios, entre los que figuraba el aeropuerto de Berlín. Las autoridades alemanas aseguran que quería seguir el modelo de los ataques de noviembre de 2015 en París y del pasado marzo en Bruselas.

Arresto

La policía detuvo a Albakr la madrugada del lunes. Fue gracias a dos compatriotas suyos, refugiados, que lo retuvieron en su casa en la ciudad alemana tras huir de las autoridades. El ministro de Interior alemán, Thomas de Maizière, explicó que el joven llegó a Alemania en febrero, aunque no tienen claro cuándo se radicalizó, y que en junio fue reconocido como refugiado.