El parque nacional y natural de Doñana ha perdido desde principios del siglo XX el 80% de sus marismas. Así lo indica un informe de la organización ecologista WWF (el Fondo Mundial para la Naturaleza, por sus siglas en inglés), por lo que la zona protegida andaluza está más cerca de ser en la lista de la UNESCO de espacios declarados patrimonio mundial amenazados.
Se trataría del primer parque nacional de la Unión Europeo en formar parte del listado, de confirmarse. Para evitarlo, España tiene hasta diciembre para declarar Doñana libre de actividades industriales y excavaciones. Es precisamente la actividad industrial, junto a las modificaciones fluviales, que no solo han reducido drásticamente las marismas, sino que también ha disminuido en un 90% las lagunas estacionales.
Campaña para salvar Doñana
La organización internacional que ha elaborado el estudio inició el miércoles una campaña para salvar Doñana, ante una situación que califican como “crítica”. El informe alerta de la existencia de hasta 1.000 perforaciones dentro de los límites del parque llevadas a cabo por campesinos, que aceleran la destrucción.
La WWF insta al gobierno español a “actuar de una vez por todas ante la el aviso de la comunidad internacional”. Se calcula que los 540 metros cuadrados que conforman Doñana sirven de hábitat a más de 2.000 especies de animales y seis millones de aves migratorias.