Ignacio Allende Torbe, el rey del porno en España, ha hablado por primera vez de la vinculación de los futbolistas Iker Muniain y David de Gea con un supuesto caso de abusos sexuales que él gestionó. Lo ha hecho a través de la polifacética María Lapiedra, ya que el empresario de los vídeos para adultos está en prisión desde hace dos meses. Torbe afirma que este caso quedará archivado, y que los deportistas "solo querían conocer a las chicas".
 
Torbe ha entregado una carta a Lapiedra, que lo ha visitado en prisión, en la que asegura que las chicas supuestamente forzadas "eran libres de hacer lo que quisieran con ellos". El rey del porno confirma que se produjo tal encuentro, incluso que hay "muchos más jugadores" salpicados por estos episodios, "pero ni la Policía quiere saber sus nombres". Afirma con rotundidad que el encuentro entre la testigo protegida --que dice "muchas incongruencias"-- y los jugadores fue totalmente consentido, y que el asunto "quedará archivado".
 
Dejará el negocio del porno
 
Lapiedra, que ha hecho de portavoz de Torbe en el programa Espejo Público (Antena 3), ha añadido que la testigo protegida "trabaja de prostituta en Molina de Segura". Además, desvincula al empresario de cualquier conocimiento de la minoría de edad de cualquiera de sus contratadas, ya que los DNI están en todo caso falsificados y, en cualquier modo, las gestiones pasan por las manos de la secretaría del negocio pornográfico.
 
Torbe, finalmente, ha transmitido que saldrá de prisión en septiembre y, en ese caso, "continuaría en el mundo del porno sin socios ni nada". Si la libertad se demora uno o dos años, en función de la celebración del juicio, dejará el negocio "porque se ha liado pardísima y porque su madre y su hermana están fatal".