La Sala de lo Militar del Tribunal Supremo ha condenado a un año de prisión a un teniente coronel del Ejército de Tierra que creó dos cuentas de correo electrónico con nombre de mujer desde las cuales mandó mensajes de contenido íntimo y sexual a un sargento primero.
Previamente, el citado oficial, aprovechándose de su cargo y situación profesional, había accedido al buzón de correo del mismo sargento. El acusado consiguió su propósito con la ayuda de otro teniente coronel que también ha sido condenado en este caso a 10 meses de prisión.
El teniente coronel conoció, así, datos relativos a la vida privada del suboficial derivados de correos particulares que envió a la página de contactos El planazo.
Cuestión de amoríos
El citado sargento primero había tenido amistad íntima con una funcionaria civil del Ejército que, al parecer, también tuvo relación con el teniente coronel. Así, el condenado también accedió a mensajes intercambiados entre ella y el suboficial.
Los hechos ocurrieron en el acuartelamiento de Loyola en San Sebastián entre 2007 y 2008.
Espía sexual
Según la sentencia “entre los días 6 de marzo y 25 de abril de 2008 dirigió al correo electrónico del entonces sargento primero diversos mensajes de contenido íntimo, algunos de índole claramente sexual, en varios de los cuales insistía en que le remitiera fotografías en las que se le viera la cara y de los que se deduce que el suboficial ya le había envidado algunas fotografías en las que no mostraba su rostro pero sí enseñaba otra parte íntima de su anatomía”.