La conocida vidente Aramis Fuster ha ampliado su catálogo de servicios. Desde hace varias semanas, la bruja --como ella misma se define-- aparece en la página web de una afamada madam barcelonesa, Anna Solano, en la que se ofrecen "escorts maduras".
En la ficha de Aramis Fuster --que incluye diversas fotos en la que la vidente muestra sus encantos-- aparecen dos opciones: "Servicios de compañía" o "dominatrix". En el primer caso, las tarifas --para "apartamento, hotel y domicilio"-- van desde los 300 euros por una hora, hasta los 2.000 por diez horas. El "servicio lésbico" cotiza a 400 euros, mientras que el "servicio a pareja" lo cobra a 500 euros. Los "extras" o "demás opciones" deben consultarse.
La propia Solano ha confirmado a Crónica Global que los servicios ofrecidos por Aramis Fuster incluyen un "encuentro sexual completo". Sin embargo, la vidente, aunque reconoce haber autorizado su inclusión en esa web de escorts (que es como se conoce de forma elegante a las trabajadoras sexuales), niega rotundamente dedicarse a la prostitución y asegura que únicamente ofrece servicios de dominatrix (la mujer que ejerce de ama en una relación sadomasoquista) a cambio de un precio que tilda de "tributo".
"Aquí es una más, está como todas"
Solano ha explicado que, aunque de momento no ha tenido demasiado éxito, muchos potenciales clientes han llamado para asegurarse de que era la verdadera Aramis Fuster la que ofrecía sus servicios.
La madam ha revelado que se puso en contacto con ella "a través de una amiga" y que, inicialmente, quería cobrar una tarifa de 1.000 euros la hora. Algo que consideró desorbitado porque "ya está madureta" y no está el mercado del sexo a esos niveles, por muy famosa que fuera. "Aquí es una más, está como todas", ha subrayado Solano, aunque ha admitido que la tarifa de Aramis Fuster --300 euros por hora-- es 100 euros superior a la del resto de escorts de la agencia.
Preguntada por los motivos que han llevado a la vidente a dedicarse a esta actividad, la celestina lo ha atribuido a que "ha tenido algún problema económico".
"No soy prostituta, soy dómina"
La versión de Aramis Fuster, en cambio, difiere sustancialmente. La bruja admite que aparece en esa web con su autorización, pero ha asegurado que solo se ofrece como "dómina". "No soy prostituta, soy dómina", afirma tajante. Sin embargo, no le preocupa que no sea eso lo que se deduce de la información que aparece en la página.
"Soy la máxima autoridad mundial en ocultismo, sería muy torpe ofreciendo servicios sexuales a 300 euros la hora, cuando me han hecho ofertas de 30.000 euros", señala a este diario. Aramis Fuster reconoce que en su actividad como "dómina" puede haber intercambios sexuales con el dominado, pero que eso lo decide ella. Además, exige a cambio un "tributo" económico que, aunque no ha querido concretar, es muy superior a los 500 euros por hora que indica la web.
Sobre el supuesto equívoco que puede dar a entender la página de escorts, Aramis Fuster insiste: "Que hablen de mí aunque sea mal. No me importa nada. Es márketing. Todo lo que se diga para bien o para mal me beneficia".