Las diputadas de la CUP en el Parlamento catalán Anna Gabriel y Eulàlia Reguant y los concejales del partido en Barcelona, Josep Garganté y María José Lecha, participaron este domingo en las protestas en el barrio de Gràcia contra el desalojo del Banco Expropiado.
Se había convocado una manifestación con el objetivo de recuperar el local, algo que ha sido imposible por la fuerte presencia judicial. El acto se repetirá este lunes.
Lejos del cordón policial
Las diputadas y la concejal se alejaron en todo momento del cordón policial, donde sí se ha visto muchos activistas, junto a otras personas de sus respectivos plataformas y grupos políticos. Se desplazaron más lejos del lugar de mayor tensión entre manifestantes y Mossos d’Esquadra cuándo se les han acercado los primeros medios de comunicación.
El caso de Garganté fue distinto. El concejal se involucró personalmente en la manifestación, tal y como hizo en las protestas de la última semana, y denunció que había recibido un golpe de porra en la descarga policial.
Calma tensa
Los agentes habían acordonado el acceso al local que se quiere okupar por segunda vez. La tensión en la concentración ha ido in crescendo a lo largo del mediodía hasta que a primeras horas de la tarde se ha producido una carga para dispersarla.
Las cosas se han calmado en el barrio de Barcelona, aunque los agentes han reforzado la seguridad ya que no se descartan nuevas escenas violentas por la noche. Gràcia estuvo tranquila los últimos tres días.