El aeropuerto internacional de Pekín ha incorporado recientemente controles de seguridad exclusivos para mujeres. Después de probarlos durante tres meses, las autoridades han considerado que la experiencia es positiva y lo han ampliado a los aeropuertos de Shenzen, Kunming y Wuhan.
Los controles, bien visibles, están anunciados con unas letras de color rosa brillante en las que se puede leer “solo para mujeres” en mandarín e inglés. La justificación del gobierno es que las mujeres quieren evitar el contacto con los hombres durante el chequeo rutinario y, en estos carriles exclusivos, los guardias de seguridad son todo mujeres.
¿Política sexista?
Otra de las explicaciones dadas, según informa el The New York Times, es que son ellas, las mujeres, quienes suelen viajar con maletas y bolsos más grandes, con maquillaje y demás productos de cosmética. En consecuencia, según esta lógica, dichas pertenencias deben ser abiertas e inspeccionadas requiriendo de un mayor escrutinio.
El efecto de esta nueva política es que el control sobre los viajeros de sexo masculino está siendo menos riguroso y menos rápido, ya que las mujeres también pueden seguir pasando por el control convencional.
Según los datos oficiales, el nuevo carril para mujeres ha mejorado la eficiencia total del control aeroportuario en un 25%, y el de las mujeres, en un 10%. No obstante, son diversas las voces que consideran que la medida es injustificada por tener un cierto aire sexista y porque en la mayoría de países ya se contempla que sea siempre un agente de seguridad del mismo sexo que el pasajero quien realice el chequeo.