El primer trasplante de pene realizado en Estados Unidos ha sido superado con éxito. Los médicos del Hospital General de Massachusetts han sido los encargados de llevar a cabo la cirugía a Thomas Manning, de 64 años, a quien tuvieron que amputarle en 2012 el pene después de sufrir un cáncer. Tras una operación de 15 horas realizada los primeros días de mayo, el paciente se recupera ahora de la intervención.
El objetivo de los doctores era reconstruir los genitales de Manning, darles una apariencia natural y restablecer sus funciones urinarias y sexuales. De momento, un comunicado emitido por el centro hospitalario informa de que no hay señales de sangrado, infección o rechazo del órgano, por lo que ya han calificado el procedimiento como un “hito quirúrgico”.
El doctor Curtis L. Cetrulo fue el cirujano que lideró al equipo de médicos que llevaron a cabo el GUVCA, por sus siglas en inglés, el injerto compuesto genitourinario vascularizado. “Esperamos que estas técnicas reconstructivas nos permitan aliviar el sufrimiento y angustia de aquellos que han experimentado estas devastadoras heridas genitourinarias y que están tan abatidos que consideran suicidarse”, dijo el cirujano.
El antecedente de Sudáfrica
Pese al acontecimiento que supone el éxito de una intervención así, el primer trasplante de pene del mundo se realizó en el Hostpital Tygerberg de Ciudad del Cabo, en Sudáfrica. En este caso, la operación duró 9 horas y el receptor del órgano era un joven de 21 años a quien le tuvieron que amputar el pene por sufrir complicaciones severas tras una circuncisión.
Fue en 2014, y tres meses después del procedimiento los doctores declararon que había sido un éxito. El hombre concibió el junio pasado a su primer hijo.